[🍨]-; c i n c o.

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Un mes después las cosas seguían normal. Normal en el sentido de que Hoseok se divertía en dejar con las ganas a Yoongi.

O por lo manos así lo veía Yoongi.

Lo cierto era que Hoseok aún no se sentía cómodo como para tener relaciones con el más bajo, pero sí para tener juegos intensos de caricias y besos tres veces a la semana.

Estaban viendo una película, el chico de cabellos morados estaba sentado contra el pecho del castaño, técnicamente acostado porque su espalda se apoyaba en el pecho del contrario. Hoseok tenía las manos puestas frente a Yoongi, abrazandolo.

No era una película para nada fuera de lo común, una película para toda la familia. Eran alrededor de las 11 de la noche, frente a ellos habían colocado la mesa en donde tenían todo tipo de frituras que habían estado comiendo desde la mañana, el apartamento estaba solamente iluminado por la luz de la tele dejando un ambiente similar al de un cine.

Hoseok suspiró cansado mirando sin mucha atención al televisor, Yoongi se removió sobre su pecho haciéndolo sonreír. El último tiempo habían estado compartiendo muchos momentos como éstos, simplemente veían por horas películas, comían frituras y luego dormían.

Pero Yoongi tenía un plan diferente esta vez.

Hoseok acarició con cariño los cabellos morados del más bajo. Conversaban más a menudo y había podido definir que Yoongi era sumamente adorable a su manera. También descubría que cada día se sentía más atraído hacia él y no simplemente de la manera amorosa. Yoongi también suspiró pero por motivos diferentes y decidiéndose a comenzar con su plan maestro.

- ¿Me puedes pasar las frituras? -el castaño habló suave aún acariciando los cabellos del menor.

- Claro -respondió de igual manera.

Estaba decidido.

Al cabo de unos minutos escuchó un gran bostezo de parte del castaño en señal de que en cosa de minutos le pediría que fueran a dormir. Tomó aire y se levantó del pecho del mayor inclinándose hacia adelante pero quedándose sentado entre las piernas del castaño. Hoseok de tenso al instante, el trasero de Yoongi estaba literalmente sobre su miembro.

El de pelimorado sonrió con malicia mirando sin realmente prestar atención al televisor, se sacudió ligeramente escuchando un jadeo ahogado desde detrás suyo tomando eso como un incentivo para continuar haciendo movimientos cada vez más descarados y sensuales hasta que sintió el calor de unas manos detenerlo por la cintura.

Hoseok se levantó y consigo levantó a Yoongi para mirarlo fijamente. Su respiración errática, sus labios fruncidos y el ligero sudor en su frente lograron pintar una expresión confusa en el rostro del pelimorado ante tan repentina acción.

- ¿Sabes lo qué haces? -susurró el mayor con voz profunda. El menor se trabó con sus palabras ahogando un quejido cuando el castaño tomó su mano y la pasó suavemente por su obvia ereccion.

- Eh...

Las palabras el menor fueron calladas por unos labios ajenos sobre los suyos. Gimió cuando la mano de Hoseok se posó firme sobré su cintura y otra bajo su barbilla sosteniendolo suavemente. Se quedó completamente quieto procesando todo lo que estaba pasando.

Volvió en sí al sentir como el castaño se frotaba contra él logrando ponerlo en su mismo estado. Yoongi suspiró moviendo sus manos hacia los hombros del mayor. Poco a poco y sin romper el contacto, Hoseok lo empujó hasta topar con la cama y dejarlo en el borde sentado para luego despojarlo de su gran camiseta y recostarse ambos con el castaño sobre el pálido.

🍭; 𝐓𝐇𝐄 𝐇𝐔𝐌𝐀𝐍 𝐃𝐎𝐋𝐋.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora