Legend

368 22 3
                                    

Esta es la leyenda del águila blanca, quizás nunca hayas escuchado de ella o te la hayan repetido hasta el cansancio, pero aún así te la contaré, por qué está historia merece ser conocida

Corria un año desconocido, una vez la Independencia había estallado por todo el pais, en otro lugar ajeno a tales disputas que se libraban en las calles enpedradas de un México que peleaba por lo correcto, concretamente un bosque de altos pinos y niebla espesa, dónde las maldiciones y mitos rondaban con extrema libertad, dando un ambiente tetrico y místico acompañando al frío clima de las fuertes corrientes de aire, moviendo las ramas con fuerza avisando del peligro a quien se atreviera a pisar una sola hoja de aquel suelo maldito

En tal ubicación yacia una especie única ya extinta, las Águilas albinas, conocidas por ser solitarias y extremadamente asustadizas de los humanos, habitaban en los lugares malditos del país tricolor, siendo una señal de suerte que pudieras ver una en su hábitat natural por los pocos especímenes que se habían encontrado hasta el momento, un tremendo mito que pasaba de boca en boca por parte de toda la población de aquel territorio

Pero ignorando tantas de las advertencias que la naturaleza le brindaba entró a aquel lugar un canelo, no más de 19 años, cabellos quemados y mirada chocolate, vestía una camisa holgada de "saco de trigal" como se le conocía a tal tipo de tela, unos pantalones que le llegaban hasta los tobillos del mismo material y sus clásicos huaraches café que llevaba a todo tipo de viajes que tenía, y su morral lleno de tierra, que venía poco lleno por su no tan grande riqueza

Las hojas crujían conforme se adentraba más a aquel lugar misterioso, el frío era notable y podía sentir las corrientes de aire traspasar su débil ropaje, aún que ya se había acostumbrado a ello con el tiempo y tenía que pasar al fin y al cabo le gustase o no, seguía a paso apresurado ignorando cualquier ruido que no viniera de sus pisadas

Entre todo este movimiento un animal miraba a la distancia curioso por aquel chico de pisadas nerviosas, voló con torpeza acercándose a aquel humano, el moreno le reconoció de inmediato sonriéndole a la pequeña ave —ya te dije que sería complicado volar! Además el vendaje ya está flojo así que déjame acomodartelo— dijo mientras apretaba ligeramente el nudo de aquella tela verde que recubría el ala herida de su amiga, ya se conocían desde hace bastante tiempo, pues sus constantes visitas a tal lugar los conectaron

—Tengo que irme, no puedo llegar tarde eh, hoy es un día muy importante— el chico trató de apresurarse hacia su objetivo pero fue detenido por el águila que le comenzó a picotear el tobillo, lo cual el entendió y le cargó a su hombro—vamos, si puedes venir! Que te voy a presentar a un chico super lindo— dijo con algo de euforia mientras se encaminaba una vez más a su camino planeado, procurando apresurar un poco el paso para llegar pronto a su destino

Darryl, un chico guardia encargado de la defensa del gobierno de aquel tiempo, ya inconforme con los ideales que le eran planteados y las guerrillas que se disputaban solía escaparse de sus rondas para encontrarse con aquel chico, debajo del mismo y único árbol de Águilas Albinas que ellos conocían, con el era con el único con el que se podía quejar, del que podía aprender y con quién podía ser simplemente, el mismo, era su más confiable consejero y también su mejor compañero de vida, lo cual le motivaba a seguir encontrándose con el semana tras semana

Buscaba entre los altos pinos de roble oscuro por aquel chico, esperanzado de que su reunión no fuera cancelada de manera tan repentina, pero para su alivio el moreno no tardó en aparecer entre la niebla con aquella mirada esperanzada que el tanto amaba, no tardó en irle a abrazar con euforia, pues hoy era el día, era el día en el que finalmente se libreraria de todos los problemas que le seguian

—Traes todo? Por qué luego no vos a andar regresando por tus cachivaches— mencionó mientras revisaba la bolsa del contrario que asentía con algo de nerviosismo, le tomo por ambos lados del rostro para que le mirara a los ojos y se perdió en los ojos esmeralda que cargaba consigo—Lo haremos bien, nada malo pasará está bien? Ellos no nos llegarán ni a los morrales va?— el contrario asintió con ojos enamorados pero se echó para atrás cuando dirigió la mirada hacia el ave que se posaba en el hombro de su amado.

—No te asustes! Es solo un águila que me encontré paseandose por el prado, solo vámonos que no queremos que los frijoles se quemen— entonces tomo la muñeca del más alto y comenzó a guiarlo entre los troncos, caminando firme hasta que el contrario habló —No debiste haber dejado frijoles en la hoguera sabes, si ya sabías de ante mano que íbamos a escapar no debiste ponerte a co—

—Es una metáfora Darryl! UNA metáfora no deje nada en la hoguera por dios!— el de cabellos castaños solo río ante el puchero de su amigo y le siguió con cautela, tratando de no despegar su mirada del camino, pero su calma se detuvo cuando el animal hizo un sonido fuerte causando que ambos agacharan la cabeza por el sorpresivo chirrido cerca de sus oídos, y entonces una bala paso a su lado, alertandoles de inmediato

—Los tenemos! Atrapenlos!— oyeron la fuerte voz de un hombre en la distancia, e inmediatamente comenzaron a correr sin rumbo, sin siquiera pensar se metieron entre los altos árboles y la espesa niebla tratando de perderlos, pero parecía imposible pues los disparos y pasos se seguian escuchando muy cerca de ellos, la respiración subía y los nervios estaban a flor de piel, sus pisadas ya no eran tranquilas y confiadas, eran nerviosas y rápidas, sin darse cuenta la distancia se acortaba entre el ejército y los dos nobles amantes, el animal logro levantar vuelo para tratar de escapar del lugar con rapidez

Una bala impacto el brazo del mayor, causando que gritara de tal dolor y apresurara el paso rápidamente, jaloneando al chico moreno en el proceso, este encontró la solución, el águila se posó dentro un pequeño hoyo simulando una cueva que podría ayudarles y el de mirada oscura lo llevo hasta allí con rapidez, pero aun a unos metros de la salvación recibió una bala en su estómago, haciéndole caer al suelo inmediatamente, por lo que tomando la iniciativa el ex-guardia tuvo que cargarle hasta el oscuro hueco donde se metieron lo más posible

Los guardias en busca de los fugitivos pasaron de largo con algo de suerte mientras ambos contenían la respiración evitando hacer cualquier ruido, después de unos segundos y cuando el panorama se veía limpio le recargo en las paredes de roca inspeccionando la herida —Oh por dios Zak! Esto se ve muy mal dejame- el nombrado removió su mano de la herida —Tu estás sangrando también, yo ya no tengo mucho más que hacer aquí...solo déjame dormir un poco y— Darryl solo lo sacudió con desesperación—no no digas eso! Encontraremos algo que hacer, no te voy a dejar ir yo...yo— el chico aún sin palabra se dejó caer en el pecho contrario y dió un largo suspiro mientras derramaba lagrimas

—Al menos me puedo quedar contigo un poco más?— mencionó con pena, sabiendo que no tenian escapatoria, pero no recibió respuesta, hasta que subió la mirada para darse cuenta que el chico ya había cerrado los ojos y ya no respiraba, desesperanzado y cansado de seguir despierto miró a un lado encontrándose con el águila dormida al igual, el moreno había colocado su mano ensangrentada encima de una de sus alas causando que se tiñera de este color

—Huh...eso sería una linda bandera eh...hehe—se recargo en la pared, bajando el ritmo de su respiración poco a poco mientras se sentía más ligero, pero estrujaba la mano de su amado en el proceso, cerro los ojos mientras se relajaba y se dejaba llevar por las suaves corrientes de aire, sin pensar en regresar.

(Esto es para historia así que probablemente quedó más feo que otros disculpen xd)

Ha-ppy One Shots EN ESPAÑOL O_ODonde viven las historias. Descúbrelo ahora