Haikyuu spanking

Nishinoya parte 2

Nishinoya tenía dos tipos de pensamiento chocando en su cabeza. Por un lado, quería decirle a los tres mayores que se fueran a la mierda y que no tenían derecho a regañarlos y estar tan pendientes de su vida; por otro lado, se alegraba de tener amigos que se preocuparan por él y estaba arrepentido de cómo le había hablado a Asahi. Ahí estaba, con los tres gigantes enfadados delante de él, pero si le decían muchas cosas, el enfado ganaría a su parte racional.

- Nishinoya, ¿sabes por qué queremos hablar contigo?- preguntó calmadamente Sugawara

- Por qué no podéis meteros en vuestras cosas y tenéis que venir a joderme a mí.- estalló el pequeño libero, inmediatamente después de esa frase se arrepintió.

- Escúchame jovencito.- Daichi se sintió en ese momento como un viejo y quiso pegarse por ello.- Si no quieres que te expulse indefinidamente del equipo vas a cerrar esa boca y no la vas a abrir a no ser que sea para pedir disculpas por tu comportamiento o para contestar a una pregunta directa.

Asahi y Sugawara miraron a su capitán aguantándose la risa al ver lo padre que había sonado, pero se controlaron y no dejaron ver sus muecas de risa manteniendo su pose de enfado. Noya pareció entender que no tenía más remedio que estarse calladito y bajó la cabeza, mostrando por fin algo de respeto por las tres personas que tenía delante. Entonces Daichi continuó pero con una voz más suave:

- Quiero que nos expliques por que estabas esta mañana castigado, porque no hiciste caso a Suga cuando te advirtió que te centraras en tus estudios.

- Me quedé dormido y llegué tarde...no se... - dijo el pequeño libero con una voz casi inaudible

- ¿Y por qué te has quedado dormido? No te atrevas a mentirme porque sé que es por quedarte hasta tarde viendo ese programa que tanto os gusta a ti y Tanaka, os he escuchado hablar de ello.

- BUENO NO ES ASUNTO TUYO, ES MI VIDA Y PUEDO HACER LO QUE ME DE LA GANA, JODER.- Noya no aguantaba la voz de decepción de Daichi.

- Tienes que pensar que podrías perder tu plaza en el equipo por estas cosas, antes de ser tan egoísta piensa que tus acciones repercuten a otra gente.- continuó Daichi.

- Solo te importa el puñetero equipo...- iba a continuar pero se vio interrumpido por un grito de Sugawara

- ¡A callar los dos! Daichi, Asahi, dejadme hablar con Nishinoya asolas por favor.

Pasándose una mano por la cara, Daichi salió acompañado de la estrella del equipo, confiando en que Sugamama sabría cómo manejar a su pequeño libero. El colocador miró al otro que estaba cabizbajo con los puños apretados y respirando con dificultad.

- Noya, no se por qué estás así y si quieres hablar de cualquier cosa sabes que estoy aquí para ayudarte. Daichi, Asahi, yo y todo el equipo nos preocupamos mucho por ti y no queremos perderte, por eso estamos tan pesados. Daichi no quiere que te hechen del equipo pero por ti, no por nada más. Está preocupado de como reaccionarás tú al quedarte sin el Voley. Y Asahi, está destrozado, no lo exterioriza pero le preocupas muchísimo, hoy después de que le gritaras estaba tan triste...

Sugawara iba a continuar cuando un sollozo cortó su discurso, Noya estaba llorando, pesadas lagrimas caían por sus mejillas. Le temblaron las rodillas y se dejó caer al suelo, Suga no tardó ni medio segundo en alcanzarlo y abrazarlo.

- Shhh, Noya suéltalo todo, vamos, está bien, shhh- le susurraba mientras le acariciaba la espalda. Así estuvieron unos minutos hasta que Nishinoya se separó un poco de él y con la voz más triste del mundo le dijo:

- Lo siento... lo siento mucho Sugawara, no quería preocuparos, no quería que esto pasara. Ayer me quedé despierto hasta tarde...me he despertado tarde, el sueño me pone de mal humor y el día solo ha ido de mal en peor...

Sugawara le puso las manos en los hombros y lo separó un poco para mirarlo de frente mientras hablaba:

- No pasa nada, todos cometemos errores, lo importante es aprender de ellos para no volverlos a cometer. Ahora cuando ellos entren, te vas a disculpar con ellos también y los vas a escuchar. Te aviso ahora, hemos pensado en castigarte por diversas razones, entre ellas yo te voy a castigar porque estuve mucho tiempo diciéndote que estudiaras para que no me hicieras caso y creo que me he ganado el derecho de reprenderte como crea. Te veo como a un hermano pequeño Noya y me preocupo mucho por ti. Levanta.

El libero se tensó al escuchar la palabra castigo, no sabía que iban a hacer pero no quería ningún tipo de castigo. Se levantó lentamente y miro a Suga que lo cogió del brazo, lo puso de lado y sin darle tiempo ni siquiera a pestañear le dio dos palmadas en el trasero que sonaron fuerte y tuvieron que doler más.

PLAS PLAS

Nishinoya estaba en shock, ¿Sugawara acababa de pegarle?, viendo que no iban a llegar más azotes, se giró lentamente a mirar al colocador con estupefacción.

- Dos suspensos, dos azotes. Si hay una próxima vez no seré tan generoso.- contestó Sugawara como si no hubiera pasado nada.

Seguía congelado en su lugar, le había pegado y ahora estaba ahí tan tranquilo. ¿Próxima vez? ¿Pensaba repetirlo? No tuvo tiempo de preguntarle porque Suga le volvió a abrazar y él se dejó hacer.

- No me odies por eso Noya, realmente te lo merecías. ¿listo para disculparte con Daichi y Asahi?

Nishinoya afirmó lentamente con la cabeza. Le sorprendía que no le importara que Suga le hubiera pegado, es más, estaba de acuerdo en que se lo merecía y agradecía que su colocador hiciera como que no hubiera pasado nada. Eso sí, no iba a darle motivos para repetirlo nunca. Sugawara abrió la puerta y los otros dos entraron apresurados, habían escuchado los dos golpes desde fuera y nos sabían que podían encontrarse al entrar.

- Daichi, Asahi, lo siento mucho, he sido un idiota y no debería haber pagado con vosotros mi frustración.- dijo Noya mientras agachaba la cabeza.

- No te preocupes por eso, ahora escúchanos un momento ¿Sí? Y déjanos acabar antes de reaccionar por favor.- Habló Daichi por primera vez desde que habían acompañado a Noya al vestuario. Cuando éste asintió, fue Daichi el que continuó.

- Está muy bien que lo sientas Nishinoya, pero los tres hemos estado hablando y creemos que mereces un castigo. No puedes descuidarte tanto, podría afectarte y no queremos que te pase nada malo, queremos a nuestro feliz e hiperactivo libero de siempre. Creemos que es demasiado cruel sacarte del equipo por un tiempo, así que te damos estas dos opciones, o dejas el equipo hasta la próxima temporada o aceptas unos azotes, mejoras esas notas y te dejamos seguir entrenando y compitiendo.

No pasó ni un segundo antes de que Nishinoya les hiciera saber que prefería la segunda opción. Asahi cerró los ojos cuando escuchó esa respuesta no queriendo ser él quien se los diera, pero se había comprometido y era por el bien de su querido libero.

- Muy bien, Asahi será quien te castigue. Después de eso todo quedará perdonado y esperamos un cambio Nishinoya, te queremos mucho.

Tras decir esto Daichi lo abrazó fuertemente y salió con Sugawara en dirección al gimnasio a entrenar para mantener la cabeza ocupada. Noya no podía creerse que fuera la persona a la que más admiraba la que fuera a castigarlo, pero no se lo iba a poner difícil, se notaba que Asahi tenía tantas ganas de salir de esto como él.