conocerte, ¿fue mi error?

Capitulo 4

El camino en el que andaba no era ni remotamente parecido al que lleva a mí casa, era como un camino de piedras y muchos árboles, un prado lleno de flores rojas, flor que jamás había visto antes en mi vida, era todo muy diferente a lo que es en la ciudad de donde vengo y me asusté, estaba atemorizado, ¿porqué me trajo a tan extraño lugar?...

Ken: usias ¿que es esto?, ¿por que estamos en el bosque?, lo sabía tú también me quieres violar ¿cierto?

Usias: primero que nada ken, calmate!! No es lo que imaginas, te tengo una sorpresa que te hará olvidar el mal rato que acabas de vivir.

Guarde silencio todo el resto del trayecto que no era poco, calculo haber caminado una hora y media aproximadamente, ya estaba agotado y cuando iba a abrir la boca para expresar mi agotamiento físico usias habló...

Usias: mira hay esta mi sorpresa!!!

Mire hacia donde apuntaba él y mis ojos se maravillaron con lo que veían ¿como podía caber tanta belleza en un solo espacio?, flores rojas con azules mezcladas entre sí dándole una armonía especial en el medio una manta con una canasta de picnic encima y frutas de tantos colores que puedas imaginar, llore era demasiada la belleza que mis ojos veían que no pude contenerme, y pensar que todo esto lo hizo por mi y para mi, me conmovió saber que para él soy tan valioso que fue capaz de armar todo esto solo para que yo olvidara el trágico momento vivido.

Nos sentamos me decía que no sabía cómo poder asombrarme y que creía que eso era poco yo sólo le agradecía por tan rico momento, las horas pasaron y estaba tan entretenido que no me di cuenta, me percate cuando ya el sol se escondía, lo pasé genial junto a él, reíamos a carcajadas me contaba algunas historias asombrosas de adas y duendes yo solo reía, pensaba que sólo eran fábulas que me contaba los imitaba y hacía mímica de ellos como si los conociera de toda una vida, cuando el sol había desaparecido le pedí me llevara de regreso a mi casa y me dijo ¿estas seguro de querer irte? Y le dije que si,

Ken: quizás mi madre esta preocupada por mi, ya que aquí no tengo señal en el teléfono...

Usias: muy bien, solo dejame guardar todo y volveremos sin que te des cuenta.

Asentí y lo ayude a ordenar todo, en un rato ya estaba todo guardado en la canasta de picnic, me tomo de la mano y me pidió que cerrará los ojos y que por nada del mundo los volviera a abrir, sentí una brisa pasar por mi cara...

Usias: ábrelo!!

Obedeci y estábamos frente a mi casa en solo segundo ¿como lo había hecho? Lo mire asombrado no cabía en mi cabeza el hecho de estar en un bosque en un segundo y al otro frente a mi casa, ¿habrá hecho magia? No lo creo...

Usias: estas bien?

Ken: como lo hiciste?...

Usias: otro día te enseñó ahora entra aunque aún es temprano para llegar a tu casa (rio)

Mire mi teléfono y eran solo cinco minutos más tarde que la hora en la que salí de clases, pero yo estaba seguro de que eran casi pasadas las diez de la noche...

Ken: no entiendo nada, ¿como lo hiciste?

Usias: todo a su tiempo, ya te explicaré cuando sea la oportunidad todas las dudas que están en tu mente no te preocupes por ahora, solo entra que una noticia te espera, te quiero ken!!

Expresó este y con un suave beso en mi mejilla se alejo llevando consigo la canasta del picnic, entre a casa atontado por sus palabras era todo tan misterioso en el, en el comedor estaba mi nana y unas personas vestidas de negro con lentes oscuros los cuatro me miraban al mismo tiempo a lo que mi nana y un hombre extraño de buen vestir me miran asombrados, ¿que rayos estaba pasando aquí?