Llegaste a cambiarlo todo

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22 DE DICIEMBRE DE 2O19
Volteé y vi a Matt quien venía hacia mi, una vez que me alcanzó se acercó a mi lo más rápido que pudo, cuando estaba enfrente de mi.

—¿Estas bien?— dijo preocupado

—Si— le conteste

—¿A donde vas?—me dijo confundido

—A mi casa, no tiene caso que me quede aquí

—Olivia a Joshua le hace bien el que estés aquí— me miró a los ojos

—¿Le hace bien?— bufé— No hizo nada

—Tranquila— dijo el— Pilar es muy importante para él, y le cuesta cierta cosas,Vamos Olivia quédate

—La verdad no tenía tantas ganas de salir hoy

—Bueno déjame llevarte por lo menos

—No, a Joshy le haría mal saber que te fuiste y además vienes con Sofía, quédense

—¿Estas segura?

—Claro que si— suspiré— ¿Qué pasa con Sofía?

—Es mi amiga, siento que me hace bien como tú lo haces con Joshua, desde lo de Pilar ella ha estado conmigo y estoy bien

—Siento mucho lo de Pilar— le dije y sonreí

—Yo siento que hayas tenia que lidiar con un tonto como Ethan

—Ya pasó igual

—Si algún día quieres hablar de ellos aquí estoy, fuimos engañados mutuamente

—Si, pero creo que no es un gran forma de iniciar una conversación o amistad con ese tema

—Tienes razón

—Oli— dijo Joshua llegando y mirándome con Matt

—Bueno yo los dejo— dijo Matt, le dio una palmada a Joshua y se fue

—¿Estas bien?— dijo mirándome preocupado

—Ahora te preocupas— le dije y lo mire

—Yo se que no hice nada al instante pero ya hablé con Pilar

—Sabes no tiene caso que me quede— le dije y suspiré— No me siento cómoda con tu prima aquí

—Olivia por favor

—Perdóname

Salí de casa de Joshua, había mucho frío y el hecho que el agua en donde caí estuviera fría y yo seguía mojada no ayudaba mucho. Camine lo más rápido que pude.

—Olivia— gritó Joshua.

Yo solo lo ignoré y seguí caminando, sentí su mano sobre mi brazo en menos de cinco minutos, le hizo voltear para mirarlo

—No te voy a dejar ir— me dijo

—Joshua— lo mire— No puedo ,simplemente el hecho que esté ahí me hace mal

—Te prometo defenderte

—¿Como puedo confiar en ti?— lo mire triste

—Liv— me tomó las mano— Tú me importas mucho y no quiero hacer nada ni para lastimar, ni decepcionarte

Solo suspire y lo miré, seguí sus manos tibias, yo me estaba congelando

— Vamos a mi casa, tienes frío, lo sé— me dio su chamarra— Te prestaré algo de ropa ¿Si?

—Está bien

Caminamos en silencio a su casa y entramos, la música seguía, subimos hasta su habitación donde le di su chamarra y me quite los zapatos que estaba mojados al igual que mis calcetas