Cogió a Arthur, su primer pincel, lo mojó en pintura negra y empezó a arrastrarlo por el lienzo, dejando dulces pinceladas que poco a poco fueron formando el rostro de una chica.
Sky disfrutaba pintando por la mañana porque la luz del sol reflejaba mejor el color,
El color y los pinceles.
La cabeza de Arthur brillaba oscura mientras Sky contemplaba las líneas que había hecho, queriendo meterse dentro del lienzo y vivir sus sueños ahora plasmados en blanco y negro.
Arthur sería un ser inerte para ti.
Un simple objeto inanimado.
Un trozo de madera con pelos.
Un utensilio que en cualquier momento puedes desechar.
Para ella no.
Sky lo disfrutaba como un amigo.
Arthur.
Quizá su mejor amigo.
Quizá su mejor forma de expresión.
Arthur.
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Un cielo de pinceles.
Poetry"Ella se llamaba Sky. Y sus pinceles también tenían nombres. Supongo que eran especiales de algún modo. La gente decía que Sky emanaba arte al pasar; Sky respondía que era por culpa de los pinceles del bolsillo, porque para ella, no eran sólo pincel...