Kim Namjoon; El perdón

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El rubio lavo y limpio perfecto sus manos antes de entrar al cuarto de la pequeña Suni. El médico le permitió verla solo un momento, después de insistir tanto.
Se aseguro de tener bien puesto su cubre boca para que su hija no se asustara de verlo con el labio partido. Se acerco lento y quito su gorra negra en el asiento para tomar la mano de la niña.
El pecho de Suni subía y bajaba enérgicamente, ella se encontraba muy agotada y las pocas energías que tenia en su pequeño cuerpo las requería para poder llenar sus pulmones con el oxígeno que necesitaba.

Bajo su cubre boca y beso la mano de su pequeña, sintiendo un dolor en su pecho. Quería decirle que el; Su papá, estaba ahí, para ella. Que no la dejaría sola ni a ella ni a sus hermanos y su papá Jin.
Que son una familia verdadera que ella es su hija, y el su papá. Pese a quien le pese.

Pero el verla muy cansada con sus ojos cerrados sin tener fuerzas para poder abrirlos y su pecho moviéndose frenéticamente. Le partía el corazón en mil pedazos y le daban ganas de volver a romperle la cara a Namjoon ¿y porque no?, también herirlo de bala.

Dejo la mano de Suni y frustrado llevo sus manos a su rostro golpeado tratando de liberar su angustia y su enojo. Sabe que su pelinegro esta muy preocupado por su hija y si el sale con los ojos llorosos, es seguro que lo preocupara más.
Respiro hondo y se volvió a ella para besar ahora su frente y decirle bajito paro no alterarla...

—princesa, mi hermosa Suni... estoy aquí contigo... tienes que ser fuerte bebé... *angustiado* porque si te pasa algo... *traga nervioso* no, no, Suni, tu papá Jin y Yo te amamos. Tienes que ser fuerte princesa... quiero verte despierta

Tocaron la puerta indicando que el tiempo se había terminado para el

Se tranquilizó y de nuevo volvió a besar la frente de la niña no queriendo dejarla sola en la habitación.
El y Jin pasaron la noche en el hospital no dejarían sola a su hija al igual que el castaño.

La noche fue muy incomoda para el pelinegro por su embarazo. Pero se sentía un poco aliviado y seguro de tener a su rubio a su lado.
Despertó por completo al oír la voz de Yoongi mientras hablaba por teléfono algo estresado. Tallo sus ojos y bostezo haciendo gesto por su a dolorida espalda, checo la hora 8:05 am dio un salto sorprendido de la hora y de prisa se acercó a pedir informes sobre Suni

—¡solo necesito unos minutos mas! —colgó su teléfono y alcanzo al pelinegro.
Jin lo abrazo feliz al escuchar que Suni había amanecido bien, consciente y aunque débil ya podía respirar por si sola.

—¡¿escuchaste eso Yoongi?!

—¡Si Jinnie Suni resistió!

—¡¿vayamos a verla si?!

Tomados de la mano entraron a la habitación de la niña, quien lloro al ver a sus padres juntos. Yoongi de inmediato corrió para abrazarla
—¡No No, No princesa no llores¡

—Suni hija, no tengas miedo hablo Jin acomodando sus cabellos negros sueltos

—¿princesa?... —llamo el rubio ala pequeña quien seguía escondiendo su rostro en el tórax del rubio. —¿Suni? —dijo Jin

Poco a poco la niña soltó al rubio y con sus ojos castaños en lágrimas lo miro y pregunto...

—¿tu... si eres mi papá?...—
Ambos se miraron y el pelinegro mordió su labio, las palabras de su hija le habían desecho el corazón. El rubio trago nervioso sintiéndose entre la espada y la pared ya no quería que hubiera mas mentiras en su relación con Jin y eso incluía a los niños, pero ya habían acordado hablar con ellos cuando tuvieran la edad para comprender la situación.

No ahora

—Suni... cuando conocí a Jin... *nervioso* tu, eras muy pequeña y... *suspira* ... bueno, yo me enamore de el y de ti... de tus hermanos... —suspiro derrotado y con mucha presión encima tratando de decir las palabras correctas para no dañar mas a su hija. Mientras Jin atento estaba, con el alma en un hilo

Me Enamore De Ti (Sujin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora