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JungKook acomodó su bata antes de salir, TaeHyung había dicho que alguien importante esperaba por él afuera, no quería dar una mala impresión a quien fuera que estuviera allí. Cerró la puerta blanca con un letrero que decía "solo personal autorizado" detrás de él y caminó hasta la recepción. Al llegar allí arqueó una ceja al ver una persona que conocía perfectamente con un ramo de rosas. Su vista viajó de TaeHyung hasta el chico que trabajaba en la florería de enfrente, y a quien veía mínimo, cinco veces al mes.

Suspirando cansado se acercó hasta donde el chico estaba esperando parado, quien al verlo cerca estiró el portapapeles hasta él para que pudiera firmar, confirmando que las flores habían sido recibidas y en buen estado. Con la pluma apuntó hasta el escritorio de la recepción, el chico quien captó su mensaje caminó hasta el escritorio para dejar las flores perfectamente colocadas sobre el escritorio.

-No esperaba verte tan pronto por aquí, YaBin.- Dijo colocando la pluma sobre el portapapeles una vez terminó de firmar, para luego estirarlo hasta el chico quien solo se encogió de hombros poniendo el portapapeles debajo de su brazo.

-Yo solo hago mi trabajo, señor.- Se animó a decir mientras hacía una pequeña referencia para poder salir una vez del lugar, no había razón alguna por la cual era necesario entablar una conversación con los clientes si no era nada sobre la entrega.

JungKook rodó los ojos por el apodo, ni siquiera era tan mayor para que lo llamara señor, estaba seguro que el chico no era mayor de los dieciocho años. Se quedó tan concentrado viendo cómo él pasaba la calle y llegaba hasta el otro lado, para luego perderse detrás de la puerta de la florería. La voz de TaeHyung lo sacó de su trance. Se giró hasta ver lo que estaba haciendo, tenía una pequeña pero llamativa tarjeta en las manos mientras la leía en voz alta.

-Llena el mundo de colores con tu bonita sonrisa.- Finalizó de leer la tarjeta y se volteó hasta JungKook quien lo veía con una extraña mueca en su rostro. -No pensé que estuvieras en una relación tan rápido.-

JungKook negó con la cabeza rápidamente y caminó hasta él para quitarle la tarjeta de las manos y dejarla sobre las flores.

-No estoy en una relación, TaeHyung. Es simple, la chica de enfrente gusta de mi. Los últimos meses he estado recibiendo flores y tarjetas, y todo comenzó una semana después de que la florería fuera abierta.-

TaeHyung abrió sus ojos un poco sorprendido, tomó las flores entre sus manos con una pequeña sonrisa en sus labios al saber la razón, al parecer JungKook era todo un casanova. Llevó su nariz hasta una de las flores para olerlas, olían muy bien. Escucho a JungKook decirle que las dejara sobre la mesa porque las podía dañar.

-Pensé que no te gustaba recibirlas.- TaeHyung dejó las flores sobre el escritorio y caminó detrás de JungKook hasta la sala de espera y tomó asiento en uno de los bonitos y cómodos sillones del lugar.

-Es bonito, pero es extraño, ni siquiera he entablando una conversación con ella, no la conozco físicamente, aunque la he visto entrar y salir del lugar algunas veces pero no de cerca. - JungKook rascó su nuca con una mirada incómoda. -Además es complicado para mi mantener esas flores con vida, aunque siempre envía con ella tips de cómo cuidarlas y simplemente se me olvida o no tengo tiempo para cuidar de ellas.-

Estaba a punto de tomar asiento a un lado de TaeHyung cuando uno de sus compañeros llamó pidiendo ayuda con uno de los pacientes. Rápidamente respondió al llamado de su compañero y comenzó a caminar hasta donde estaba su compañero no sin antes advertirle a TaeHyung de no molestar a los pacientes.

Flowers    •Kookmin Au•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora