Marcos

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-No vas a matarme verdad? -me pregunto, seguido de una risa totalmente despreocupada.
-Claro que no! Por que lo haría?
-Hace poco escuche en las noticias que mataron aun pata y que conoció al asesino por la app.
-Enserio?! Jajaja no sabia nada de eso.
-Bueno, solo no me mates. Espérame en la esquina, comprare algo primero.
-Esta bien.

Escuche el ruido de su respiración y el golpeteo de metal contra metal, luego su voz, esa maldita voz. Un par de minutos después volvió a la llamada:

-Vale ya voy para allá, de verdad no me mataras?
-Ya deja de decir eso, igual y tu eres el que esta pensando matarme.
-Jajajaja no nada de eso, ya colgaré.

Blancon, unos cuantos centímetros mas bajo que yo, nunca me gustaron mas bajos pero ya estaba ahí, que iba a hacer? Además, me caía muy bien.

-Espérame aquí, voy a ver si no ahí nadie en la puerta.

La casa era amarilla en ese entonces, dos pisos, el tercero aun no estaba terminado, tenia una puerta de metal seguida por otra de madera, la parte del segundo piso sobresalió un poco a la del primero, lo que creaba una región de sombra en la cual desee esperar por tan terrible calor.
Estaba asustado, no tenia mucha experiencia haciendo eso pero al vez el me causaba algo de confianza, tal vez por que es 5 años mayor que yo o por su seguridad tan despreocupada para hacer literalmente casi todo.
Me hizo una seña con su mano y entonces me acerque a la casa, el lugar era fresco pero solo pude ver una escalera y a la derecha otra puerta de madera, los escalones eran pequeños y me causaba desconfianza subir por ellos, llegamos a una especie de sala completamente vacia y el abrió una puerta corrediza de dos hojas que estaba justo al final de la escalera, abrió la puerta y entre.
Un lavadero al lado derecho, un cuarto pequeño al frente mio, con ventanas largas y pequeñas en la parte superior. El siguió por el pasadizo el cual terminaba en tres puertas, una en cada pared, abrió la de la derecha y me hizo entrar. Solo había una cama, una cómoda y una ventana.

-Siéntate -me dijo con un ademán.
Lo hice; sentía calor pero el lugar es bastante refrescante. Se recostó:

-Y dime?; Que me cuentas de ti?
-Pues de vacaciones por ahora y tú?
-Vengo de una entrevista.
-Ah entiendo, como me dijiste que te llamabas?
- Marcos, Marcos Vasquez. En ese momento no lo sabia, pero ese nombre seria el que marcaría una gran parte de mi vida y que casi la destruiría solo por los sentimientos que tuve por el, por un completo desconocido, por un tipo que pensaba que lo asesinaria la primera vez que nos vimos, que no me quitaba esos ojos cafés de encima en ningún momento.

Todo transcurrió bastante rápido y lento a la vez, no recuerdo gran parte de la conversación y mucho menos los detalles; solo vuelvo a verle recostado al lado mio, con su pecho llenándose de aire y yo solo deseando saber que hacer en ese momento.
Puse mi mano sobre su pecho desnudo y le besé, no sin antes pensármelo veinte veces, el siguió el juego y sin darme cuenta ya estaba sobre el, deseándolo dentro mio.

-Seguro? -solo me dijo eso y yo le seguí besando, fue suficiente respuesta para el, giro sobre cuerpo y me tiro en la cama, como si fuera un muñeco, muestra de que es mucho mas fuerte que yo.

Me quito el polo y me beso mis tetillas, lance un gemido enorme.
-No hagas mucho ruido
-Ok -eh intente solo morderme los labios del placer que recorría todo mi cuerpo. Luego seguí con la correa y el pantalón, yo en ese entonces tenia vergüenza de mi delgadez pero el solo parecía disfrutarla y admirarla, como un perfección casi única. Note su erección cuando se pego mas a mi, no es un pene nada excepcional pero en ese momento nunca pensé que me sentiría sometido por el durante tanto  tiempo. Solo me beso, yo completamente desnudo y el con su miembro fuera, caliente, duro y grueso.

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⏰ Última actualización: Mar 11, 2020 ⏰

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