Intenta no volverte gay - CNCO -

DÍA 08

 NARRA ERICK BRIAN COLÓN

El desayuno había sido algo poco común, Amanda estaba sentada entre Joel y Richard, platicando como si fueran los mejores amigos, ella comiendo unos deliciosos wafles cubierto con frutas y chocolate, ¿Cómo hacía para tener un cuerpo tan perfecto llevando esa alimentación?

— ¿Cómo se la están pasando, chicos? — preguntó dándole un sorbo a su cappuccino.

— Si omitimos la parte en la que tenemos que vernos desnudos — comentó Christopher.

— Los retos de contacto sexual — continuo Richard

— Y la incomodidad que se tiene que soportar — comenté — todo está muy bien.

— Y ¿ustedes dos? — preguntó observando a Zabdiel y luego a Joel, quienes se miraron misteriosamente

— Bien, me divierto mucho — contestó Pimentel con trabas.

— Bien chicos, la semana de los sobres terminó, queríamos ver que tan lejos podían llegar, a algunos se les complicó mucho — me miró — y a otros no tanto — volvió a mirar a Zabdiel y Joel — esta semana toca ña caja misteriosa — sonrió — dentro de esta caja hay diez tarjetas con dos nombres cada tarjeta, solo sacaremos cinco esta semana.

— ¿Serán más retos? — preguntó Zabdiel

— No, no te preocupes — respondió metiendo su mano en la caja, después de unos segundos sacó su mano y leyó la tarjeta — Christopher Vélez — miró al chico a mi lado — Richard Camacho, deberán estar en el área de la piscina a las 20:30 horas, lleven algo elegante por favor.

— y ¿el resto de nosotros? — preguntó Joel

— Pueden hacer lo que quieran, esta semana no tendrán que estar desnudos — sonrió — nos veremos mañana chicos, diviértanse — se puso de pie, tomó la caja y su bolso y caminó a la salida.

Richard y Christopher se fueron cada uno a su habitación, supongo a buscar que usarán esta noche.

Zabdiel y Joel estaban en el sofá, observando el televisor, una serie de guerras y dragones.

Decidí salir al patio trasero, no era de quedarme quieto así que decidí practicar unos cuantos saltos de parkour, estaba perdiendo práctica y condición.

Desde la mañana algo me tenía inquieto, no sé si sea el hecho de que las reglas del juego han cambiado, digo no me agradaban los retos en los sobres, pero al menos sabía que esperar, ahora, que carajo era la caja misteriosa, y que harían Richard y Christopher esta noche, quizá me inquietaba el tono que Amanda utilizaba al referirse a Joel y Zabdiel, digo ella lo sabe todo, no es como si este lugar no estuviera siendo grabado las 24 horas. Bien si, ya estaba pensando tonterías, pensar cosas sin sentido, suele distraerme de lo que realmente debo hacer.

Después de unas cuantas horas de practicar y hacer calentamiento, observé mi reloj, y eran las 20:00, las duchas estaban disponibles, así que decidí tomar un baño, fui a mi habitación por una toalla y salí de mi habitación, con la toalla rodeando mi cuerpo desnudo, sin percatarme, choqué con alguien, quien tambien iba saliendo de la habitación de enfrente, Joel Pimentel.

— Lo siento — dijo rápidamente mientras yo sostenía la toalla que estaba a punto de caer.

— No te preocupes — dije un poco más alerta.

— Iba a ducharme — mencionó — veo que me ganaste.

— Si — sonreí — podemos ducharnos juntos, si no te incomoda — ¿enserio propuse eso? — sin miradas — reí — cada quien con su ropa interior y dándonos la espalda, quedan diez minutos antes de que cierren el paso del agua — ¿Por qué no paraba de hablar? Si, había mencionado una estupidez y quería remediarlo, en cambio, estaba quedando como un estúpido — sabes, olvídalo.