Lost

Vivir con su Peter era lo mejor.
Se habían conocido siendo héroes: él manejaba las ilusiones, su chico las telarañas.

Era un elemental de agua a quien habían derrotado. En un principio Peter desconfió demasiado de Quentin: había aparecido en el momento justo que apareció aquel elemental.

Así que tomó una decisión arriesgada: lo llevó a la base de los vengadores, la cual era grande.

Quentin quedó impresionado. Por palabras del que sería su futuro novio, había cambiado desde que Stark había muerto. Una generación de héroes se había retirado, pero otra estaba surgiendo.

Entre entrenamientos y misiones se fueron conociendo más y más. Disfrutaban de estar juntos.

Wade, un mutante, había intentado coquetear con Parker.

Sus celos casi se apoderaban de él, y para su mala suerte el chico se había dado cuenta. Así que el castaño se despidió chocando los puños con Deadpool y con Mysterio de un beso en la mejilla.

Peter se fue feliz cuando vio el ligero sonrojo de Quentin. Era adorable.
Quería pasar todo el día con él. Algunas veces se perdía en el azul de sus ojos. Era como ver el cielo o el mar. Incluso creía que no podía ser ninguno, porque no le hacían justicia al color de sus ojos.

–¿Y porqué no?– preguntó Quentin encima de Peter

–Los vengadores no salen entre sí – contestó dándose la vuelta, quedando ahora él encima

–¿Qué no Tony y Steve salían?– detuvo el golpe del menor

–¡Guarda silencio! Es un secreto – logró doblar su brazo, quedando de nuevo encima, en la espalda de Beck.

–¿Y porqué me lo dijiste?

–Para entrar en confianza

Quentin comenzó a reír. A veces el chico podía ser muy tierno. Aunque la diferencia de edad no era mucha (5 años) podía ser muy tierno si se lo proponía.

–Aparte, yo no soy un vengador – comentó dando una vuelta, de tal manera que se libró de Spiderman

–Vives aquí, trabajas aquí, vamos a misiones juntos y con Los vengadores lamento decirte que si lo eres.

–Sólo una cita

–¿Y si no sale bien?

–Tenemos otra– encogió sus hombros.

El menor se levantó y le dio su mano para que se levantara, cosa que no hizo. Simplemente lo jaló hacía él.

Quedaron frente a frente y se rieron como tontos. Es que lo eran cuando estaban juntos.

–Oye Quentin ¿porqué tienes los ojos más bonitos del mundo?

–Dudo que sea así, tu tienes los ojos más bonitos de universo.

La voz de Nick los sacó de su trance. Con un buen pretexto los dejó ir sin preguntar más. Sonrieron complices y cada uno se fue a su habitación, para prepararse e ir a su cita.

Parker estaba por tener un arranque de desesperación por no saber que ponerse y es que ¿con que se vería mejor? ¿Qué ropa podía ponerse para ocultar su traje?

Y Quentin estaba igual. Sabía que su traje verde tenía que ser cubierto con algo más. Eligió simplemente un pantalón negro, una playera negra y una chaqueta.

Cuando salió a ver donde estaba Peter, se encontró con que el joven se había puesto lo mismo que él.

Hubo un sonrojo por parte de ambos.
Eligieron irse a perder por ahí, a la azotea de un edificio para comer pizza.