CAPITULO 39: "HASTA NUNCA"

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-Piernas...

Issei golpeo el suelo con la punta de su pie derecho solo para después intentarlo con el pie izquierdo comprobando si algo le dolía

-Bien. Brazos...

Haciendo estiramientos, moviendo sus brazos y apretó sus puños con firmeza cuando no sintió una sola molestia

-Perfectos. Espalda...

Estirando y moviendo de todas formas su espalda, solo produjo unos crujidos antes de que Issei se parara derecho. Aun que su espalda dolió cuando trono después de unos segundos de dolor pudo sentir un alivio y menos presión sintiéndose mas ligero

-Estupendamente, a pesar de que fui golpeado con la fuerza para volar varios metros

Con Seya
Fabrica abandonada

-Quítate de encima

Seya rugió cuando se quito de encima al demonio que era cubierto por pinchos metálicos, rasgando y arrancando pedazos de su cuerpo en el proceso de arrojar al demonio lejos antes de girar con su espada bloqueando un enorme puño que lo enterró en el suelo hasta las pantorrillas

-Pedazos de porquería les enseñaré a respetarme

Seya tomo el brazo del demonio gigante y le dio un fuerte tirón para acto seguido soltar un cabezazo. En este momento los tres demonios habían olvidado ya el motivo por el que habían iniciado esta pelea y ahora solo seguían la ley del mas fuerte, si Seya derrotada a ambos demonios lo obedecerian al contrario si Seya era derrotado seguramente lo asesinaron por puro rencor. Este echo hizo que a pesar de que la cabeza del otro demonio fuera mas dura de lo que esperaba no mostró señal de retroceder o de que le hubiera afectado su propio golpe, por otro lado el demonio no había recibido una brisa de aire en su rostro y su visión comenzó a dar vueltas y mas intenso se volvió cuando otros tres cabezazos volvieron a aterrizar en su nariz

El demonio se tambaleó hacia atrás, sus pasos retumbantes sacudían el suelo ligeramente, Seya tenia planeado atravesar su corazón en ese momento de no ser por que otra vez el demonio cubierto de pinchos se le había echado en su espalda. Esta vez el demonio se aferro con su piernas a los brazos de Seya y con uno de sus brazos al cuello, inmediatamente comenzando a rasguñar y apuñalar en donde podía al pelinegro, Seya se sacudía intentando quitarse de encima al bastardo oportunista que se le había echado encima sin mucho éxito.

El gran demonio ayurdido y mareado sacudió su cabeza unos segundos solo para ver delante de él a los dos demonios que luchaban por el liderazgo, perfectamente acomodados para ser aplastados con toda la fuerza de su cuerpo. Seguido de un rugido el demonio correr hacia ellos, ambos demonios dejaron de pelear al ver que ambos serían aplastados y fue el momento en el que 'Huye hoy y pelea mañana', no sonaba nada mal, pero ambos se tenían sujetos mutuamente, impidiendo que se pudieran apartar justo a tiempo.

Con los ojos abiertos, fijos en el demonio que corría hacia ellos dispuesto a aplastarlos abrieron sus bocas en sorpresa. Centímetros antes de se aplastados una gruesa hoja de acero se estrelló en la cabeza del demonio desviando su embestida. Pasando a un lado de Seya, el demonio siguió con su recorrido hasta chocar con el muro exterior de la fabrica haciendo saltar escombros

Tanto Seya como el demonio quedaron atónitos cuando vieron que el que los había salvado resultó ser Issei que durante su pelea había aprovechado para arrastrarse hasta su espada con cuidado de no ser notado. Aun que aturdidos, eso no le impidió a Seya tomar la pierna del demonio que estaba igual que el para arrojarlo al interior de la fabrica aprovechandose de su distracción, cuando se percató de su descuido Seya la lo estaba mandando a volar

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