Fᴀᴍɪʟɪᴀʀ - Rɪɴ Oᴋᴜʀᴜᴍᴀ

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Rin sentía que se estaba ahogando, sentía que todo era su culpa, había discutido con su viejo tenia sus motivos pero esa pequeña discusión solo consiguió que Satan poseyera el cuerpo de Shirō. En otra línea de tiempo Rin hubiera agarrado la espadad demoníaca Kurikara, su sangre de demonio sería liberada y eliminaría la puerta Gehenna, pero esta no es esa línea de tiempo.

El es arrastrado a Gehenna y ya no es humano, ahora era un demonio algo que hace unos minutos no creía existente, Rin estaba extremadamente furioso con aquel que se encuentra ahora delante de él, Satán.

El demasiado intentaba persuadirlo para acoger el poder como rey de Gehenna, pero Rin no accedería a esto, Satán nunca sería su padre, Shirō Fujimoto  es su verdadero padre, fue quien lo crió sin importarle su linaje.

¡El nunca cedería ante a las palabras de Satán!.

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La vida de Yukio se había vuelto monótona y deprimente, su padre había fallecido, su hermano mayor a quien juró proteger habia desaparecido y muy posiblemente convertido en demonio, aunque legalmente su hermano estaba muerto, todo su arduo trabajo para que la gente que quería simplemente desapareciera, partía clases en la escuela Cram para exorcista de la True cross.

– ¡¡Estaremos juntas siempre en este jardín!!

Grito el demonio que estaba usando a Shiemi como rehén, el demonio en un inicio parecía débil pero en estos momento estaba dando demasiados progresos, esquiando las balas que se dirigían a una gran velocidad a dirección del demonio.

– (¡mierda, debo hacer algo rápido!)

Una idea le llegó a la mente desesperada de Yukio, el no era un Aria pero podría intentar invocar a un familiar, mientras se mantuviera fuerte el demonio que llamara no desobederia sus órdenes.

–  ¡Demonio que ahí residas, ven aquí y dame tu mano en esta lucha!

El joven de lentes dijo lo primero que se ocurrió sacando un papel que tenía dibujado un círculo mágico, se apartó cuando unas llamas azules hicieron aparición saliendo del sello.

– ¡¿Qué demonios?! – estaba apunto de partir el circulo mágico vio un pequeño gato blanco el cual estaba cubierto por fuego azul –

El gato lo miró finamente con sus ojos azules con un pequeño destello rojo en su pupila, el gato blanco apagó sus llamas y pudo notar la alegría que había en rostro del demonio pequeño.

– ¡Yukio, Yukio soy yo!

Yukio se sorprendió cuando el gato salió corriendo y colocó sus patas en el pantalón del joven de lentes.

– ¿Rin? – un poco aturdido, la voz era demasiado similar –

– ¡Claro que soy Rin, cuatro ojos!

– Bueno nii-San te ves distinto

– ¡Estaba un sitio reloco Yukio, necesitaba evolucionar para sobrevivir!

– Nii-San no eres un Pokémon...¡Rin no es momento para hablar de esto necesito que me ayudes!

– ¡Oh mi hermanito menor necesita me ayuda!

– Necesitos que distraigas a ese demonio para poder exorcizarlo – señala con el dedo el demonio con forma de flor –

– Oh solo eso...bueno lo haré solo por que me lo pediste

Rin se acercó saltando alrededor del demonio usando sus llamas azules para distraer el demonio y permitir a Yukio exorcizar a aquel demonio. Shiemi fue liberada cuando el demonio en realidad pensó que Yukio le dispararía a ella y su rehén, pero el joven fue más inteligente logrando derrotar al Mashou.

– ¿Yukio? – dijo despertando de la inconsciencia –

– Ya deberías poder moverte, las raíces de tus piernas se han ido

– ¡Yukio, así que eres un exorcista, como no me había enterado de esto! – Menciono Rin, debido a la emoción de haber vuelto a ver a su hermano le había cegado ese detalle –

– Lo siento, realmente no quería que te metieras en este mundo de exorcismo...

– ¡Comprendo pero me sigo sintiendo altamente traicionado, ahora solo falta que en realidad leyeras manga cuando me decías que no!

– Hablaremos de eso después...

– ¡¿Ese gato habló?! – señaló Shiemi a Rin –

– ¡Como que ese gato, un poco más de respeto!

– Mmm...bueno Shiemi ese gato, bueno seria mi familiar – Yukio estaba dudando sobre como explicarle a Shiemi que ese gato demonio era su hermano que fue arrastrado a Gehenna, pero de cierta forma no le mintió Rin era su familia –

– ¡Un gusto me llamo Rin! – el gato se encendió en llamas para que posteriormente se convierta en adolescente de pelo y cola blanca, orejas puntiagudas y ojos azules –

– ¡Yo soy un Shiemi Moriya, lo siento por lo de antes! – dijo de forma nerviosa Shiemi –

Después de unos segundos la mamá llegó corriendo y abrazó a su hija, al parecer su vínculo familiar había sido reparado.

– ¡Yukio tengo sueño llévame a donde sea que vayas!

– Nii-San puedes caminar...

– ¡No puedo estoy chiquito! – volviendo hacer un gato blanco –

Yukio suspiro, abrió su bolso apartando algunas de las cosas a un lado dejando un espacio.

– Sube Rin, hablaré con Mephisto sobre esto

Así Rin se subió al bolso mientras miraba todo el sitio con curiosidad.

¡Nᴏᴛᴀs ᴅᴇ Aᴜᴛᴏʀ!

Esta es mi primera historia sobre de Ao no exorcist, así que esta historia puede llegar ser un poco caca, lo siento por eso, intentaré hacer mi mayor esfuerzo para que esto no sea tan malo.