Despedida

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Después del incidente de la tienda, Mike y Marisol se encontraban solos en la casa, esperando a Kile el cual se había ido hace 10 minutos.

—¿Crees que se convirtió en uno? —Marisol mira a Mike preocupada.

—Es lo más posible ¿Tu sabes cuánto tiempo se necesita para transformarse en zombie?

—Sinceramente no lo sé. —Marisol hunde su rostro entre sus brazos.

Mike camina hacia la ventana y mira al exterior dejando ver a varios zombies rodeando la casa.

—Esto es malo, si Kile vuelve los zombies lo atacaran a menos que sea uno de ellos ahora.

—Yo tengo esperanzas en que regresara siendo un humano aún. —dice Marisol.

Mike se queda callado ya que siente un poco de celos por lo que dijo Marisol.

Transcurrirían cinco minutos y un coche se detiene en frente de la casa y hace sonar el claxon alertando a Mike y Marisol.

Marisol mira por la ventana.

—¡Es Kile!

Kile antes de que los zombies lleguen al coche baja la ventanilla y saca su pistola y le dispara a dos de los zombies.

—¡Debo ayudar! —Mike sale al exterior de la casa con su pistola y le dispara a tres de los zombies.

Kile sale del coche y le dispara a otro zombie dejando aún en pie solamente a uno.

—Mike...

Mike le dispara al último zombie de la zona.

Kile se sienta en el suelo.

—Mike, busca a Marisol, necesito hablar con ambos...

—Eh... si dame un minuto. —Mike vuelve a la casa a buscar a Marisol para luego volver a ambos con Kile.

—¿De qué nos querías hablar? —habla Marisol.

Kile le lanza las llaves del auto en que volvió a Mike.

—Hay más supervivientes, al norte...

—¡¿Enserio hay más supervivientes!? —Marisol no puede contener emoción por la noticia.

—Yo hable con ellos, les dije que llegarían después de que volviera aquí, así que vayan con ellos.

—¿Tú que harás? —dice Mike.

Kile le da su arma a Mike.

—Mátame, por favor.

—¡No! ¿por qué le pides eso? —dice Marisol.

—Fui mordido, no sé cuánto tiempo me queda antes de transformarme, sinceramente prefiero morir que ser un zombie...

—No creo ser capaz... ¡demonios es mi culpa! si no hubiera iniciado la discusión en la tienda no habrías sido mordido. —Mike aprieta sus puños, se sentía culpable, lagrimas estaban a punto de salir de sus ojos.

—Eso da igual ahora, dispara, mátame y lárguense a un lugar más seguro. —Los ojos de Kile comenzaban a cambiar en el color de su iris; la transformación estaba comenzando.

—Enserio perdóname, Kile... —Mike apunta al pecho de Kile con el arma y cierra sus ojos para luego dispararle.

El cuerpo de Kile cae al suelo a la vez que el llanto de Marisol se hacía presente.

Mike abraza a Marisol y la lleva al coche para luego conducir al norte como les había indicado Kile.

—Odio esta realidad... ¿Por qué tenía que suceder esto? —Marisol estaba sumida en tristeza.

—Debo hacerlo. —Se dice a si mismo Mike y detiene el coche—. Marisol, debo confesarlo ahora o no podré nunca. Yo estoy enamorado de ti ¡desde hace mucho tiempo! ¡yo quiero ser tu novio!

Marisol se queda callada al escuchar a Mike confesarle sus sentimientos.

—Mike... ¿enserio te gusto?

—Estoy enamorado de ti con todo mi ser Marisol.

—Si quiero ser tu novia... —Marisol lo ve a los ojos avergonzada mientras se limpia las lágrimas.

Ambos chicos se besan, para luego seguir con su camino hacia la supervivencia.

<<Adiós...Kile sobrevivimos por ti>>. Piensan ambos despidiéndose.

Ciudad de muertosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora