Mi Manera de Amarte (ADAPTACIÓN) Richard y Tu

Capitulo 3:

Narra _____:

-Con Yoselyn- dijo mirándome.

-¿Está aquí?

-Sí, está aquí no sé como supo que yo estaba aquí

-Oye, mejor vamos ¿Si? Mira a Iván- dijo apuntándolo.

-Iván, vamos.

-No...- se rió.

-Basta, vamos- dijo tomándolo del brazo.

Richard lo afirmó y lo llevó hasta el auto, lo tiró sobre el asiento trasero y yo me fui con Iván para cuidarlo, Richard conducía. Cuando llegamos a la casa Richard tumbó a Iván en su cama, yo entré a mi habitación y me lancé sobre la cama para dormir.

Richard en ese entonces estaba en su habitación en la misma posición que yo, tirado en la cama.

Richard volteaba de un lado a otro, se sentaba, se recostaba, le ardían los pies por ir a mi habitación. Yo en la otra habitación aun sin dormir apenas cerraba los ojos, se me venían a la cabeza todas esas imágenes de mi encuentro con Richard.

-Vete- susurré.

-¿Me viste?- dijo bajito.

-¿Qué haces aquí?- susurré, mientras me sentaba en la cama.

Richard cerró la puerta y se acercó sin decir nada, mis ojos se enfocaron en su cuerpo semi desnudo, la débil luz de la luna que traspasaba las cortinas te dejaban ver su cuerpo con un toque especial.

-Te pregunté, ¿qué haces aquí?

-No podía dormir.

-Son casi las 6 de la mañana.

-No me importa, quiero estar contigo pero un favor, no grites preciosa.

Richard puso sus labios sobre los míos inclinándome un poco hacía atrás para quedar recostada sobre la cama y él sobre mí, no dudé ni un segundo en poner mis manos sobre su torso desnudo, nuestras bocas se abrían al máximo casi con intensiones de devorarnos solo en un beso, Richard baja a mi cuello y sigue descendiendo por mi cuerpo dejando un reguero de húmedos besos y caricias por todo mi cuerpo. Por el calor de las noches, solo dormía en ropa interior lo que le hizo mucho más fácil a Richard el trabajo. Richard pasó su lengua por mis muslos, daba desenfrenados gemidos entrecortados, Richard procedía a bajar mi calzón pero me daba vergüenza pensar que se daría cuenta de que algo raro pasaba en mi cuerpo, ya que me sentía húmeda una vez más, intenté detener sus manos pero ya era demasiado tarde para él, ya iba resbalando la diminuta prenda por mis piernas.

-Shh... esto te va a gustar, pero trata de no gemir muy fuerte, pueden despertar a los demás.

Dicho eso, sin dejarme tiempo de decir una palabra, Richard pasa su lengua desde la parte interior de mis muslos hasta llegar a mi esencia de mujer, mi cuerpo temblaba y pasaban mil cosas nuevas, algo que nunca antes había sentido, sin darme cuenta solté un gran gemido, fue un placer indescriptible, nunca antes había sentido algo así, Richard seguía lamiendo y acariciando con sus dedos mi feminidad, me sentía única y llena de placer, mi cuerpo no daba con tanta guerra, sentía como el placer subía por todo mi cuerpo queriendo irme en un viaje mágico, pero aun no era el minuto. Richard aceleró un poco las caricias y lamidas, mis gemidos se hacían más fuertes y frecuentes, hasta que todo ese placer explotó en un orgasmo que me hizo desfallecer, Richard no tenía la menor idea de que era virgen y que ese había sido el primer orgasmo explosivo de mi vida. Con respiración acelerada aun sentía unas inmensas oleadas de placer por mi cuerpo. Richard asciende por mi cuerpo besándolo y acariciándolo hasta llegar a mis labios.