Baile de Halloween.

El baile.

Octubre había llegado a Hogwarts, una fecha esperada tanto por estudiantes y profesores por un simple motivo; El baile de Halloween.

Una evento especial donde todos pueden dar rienda suelta a su imaginación y creatividad con sus extravagantes disfraces, aunque claro, algunos prefieren usar sus clásicos y elegantes trajes y vestidos.

El gran salón se encontraba decorado para la ocasión: calabazas con caras talladas y hechizadas flotando al rededor, grupos de murciélagos de papel volando de aquí para allá, telarañas con arañas de plástico recorriendolas y los fantasmas del castillo exuberantes de la alegría que les causa la fecha.

- Queridos alumnos de Hogwarts - Hablo el director y todos fijaron su vista en el anciano mago vestido con una túnica naranja con estampado de caras de calabazas. - Algunos de sus compañeros han prepararon una sorpresa para ustedes. - Dijo para apuntar con una de sus manos al otro lado del salón, donde se encontraba una tarima con tres personas en ella.

- ¿Ese no es Malfoy? - Preguntó Peter a sus amigos en la mesa en la que se encontraban, apuntado a la tarima dónde se encontraba un piano y sentado frente a este con un elegante traje gris, una máscara que le cubría la mitad del rostro con un intrincado diseño y sus largos cabellos recogidos en una simple coleta baja.

- Eso creo. - Le respondió Remus a su amigo disfrazado de león - Sirius ¿Ese no es tu hermano? - Preguntó ahora el chico disfrazado de cazador.

- Al parecer. - Dijo Sirius rascándose la cabeza para luego colocarse de nuevo el sombrero de paja de su disfraz de espantapájaros, viendo en la tarima al chico sentado en un banco de madera, vistiendo un traje antiguo, muy característico de los vampiros, con un antifaz con un diseño muy detallado.

- ¿Y el otro quién es?. - Pregunto ahora James viendo al tercer chico, que se encontraba en medio de los otro dos con un sencillo traje de chaleco y pantalón negro con una camisa manga larga blanca y una máscara de gato, también negra, que le cubría casi todo el rostro dejando a la vista solo la boca y poco más al rededor.

- No lo sé. La máscara le cubre también el cabello y es difícil de distinguir. - Volvió a hablar Remus centrándose en el enmascarado que no tenía ningún instrumento.

- Tal vez sea Snape. - Soltó con simpleza Peter mientras se llevaba un dulce a la mesa.

James y Sirius intercambiaron una rápida mirada para soltar una sonora carcajada al unisono.

- Buena esa Colagusano. - Sirius se seco una lágrima de risa. - Snape ¡JA! - Volvió a reír.

- Canuto tiene razón. - Dijo James mientras se acomodaba la corona de su disfraz de príncipe encantador. - Todos saben que a Snape no le gustan los bailes, nunca asiste a ninguno.

- ¡Oh! Claro. - Exclamó. - Pero entonces ¿Quién es?. - Volvió si vista al trío en la tarima.

- Algún otro amigo de esos dos. - Soltó con simpleza Sirius.

- Chicos cállense, que el director está hablando. - Regaño Remus para volver su atención al viejo mago.

- Y ya que sus compañeros se esforzaron tanto en prepararles está sorpresa, espero que todos muestren el respeto que se merecen. - El director pasó su vista todos los presentes para luego dirigir sus palabras los chicos en la tarima. - Muy bien muchachos, pueden empezar.

Entonces las luces bajaron de intensidad dejando el gran salón casi a oscuras y una luz blanca, que nadie sabía muy bien de dónde venía, iluminó la tarima.

El chico con máscara de gato volteo a ver a sus acompañantes los cuales le dieron un asentamiento con la cabeza y dando un paso al frente soltó un suspiro e inalo profundo.