Chico de Flores Se Vuelve Vaquero| MewGulf

6

Gulf no podía evitar entrelazar los dedos gordos de sus pies. Estaba más que sonrojado por lo anterior. Por más que tratará de actuar normal volvía a pensar en ello. Se cubrió los ojitos con ambas manos sin poder creerlo.

—¿Mi mejor amigo me hizo...?

Él destapo sus ojos para mirar su entrepierna y volvió a cubrírselos.

—¡Oh claro que te lo hizo, tonto! Pero se sintió de fantasía...

Se volvió a destapar los ojos mirando a la puerta con terror al imaginar a Mew parado ahí diciéndole: «Claro que se sintió bien... Fue tu mejor amigo el que te lo hizo. O debo llamarlo, ¿Novio?»

El Mew imaginario desapareció y Gulf volteó al suelo con mucho miedo.

—¡Es cierto! Ahora él me pedirá ser su novio... ¡Estaba listo para enfrentar las consecuencias si hubiese sido con Saint pero ahora es con él!

Gulf se revuelca el cabello con frustración.

🤠

En la mañana del siguiente día, Mew despertó solo. De hecho, ahora que se sentaba para pensarlo: Gulf nunca fue a la cama después que tomó la ducha.

Mew bajo a la sala con mucho sueño. Entonces vio a Gulf durmiendo en el mueble de la casa con una frisa cubriéndole el cuerpo a pesar de que su ropa era suficiente cálida.

—¿Hoy no debía salir con Saint? Bueno, ¿Qué más da? Me alegra que se haya quedado...

Mew murmura en una sonrisa aplaudiendo en mudo con unos cuernitos invisibles sobre su cabeza. Entonces deja los pensamientos malvados para enfocarse en lo mucho que Gulf remueve su cabeza.

—Su cuello.— Mew dice. Él corre arriba las escaleras para buscar una almohada. Con la misma velocidad que hizo para subir las escaleras, la misma utilizo para bajar las escaleras y delicadamente alzar su cabeza un poco para ponerle una la almohada. Gulf hizo un soñoliento gruñido para tan sólo aferrarse a la almohada.

—Mírate. Pareces un bulldog. Deberías decirme "Gracias, P'Mew".— Mew le gruñe.

Gulf hace un pequeño estornudo. Suena tan increíblemente tierno que Mew se cubre la boquita sin creerse lo tierno que ha sonado.

—¡De ninguna manera!— Mew chilla en voz baja en sus manitas. —¿Cómo puedes ser tan tierno cuando duermes? ¡Debo alejarme de ti! Me puedes dar diabetes... Oh mi...

Mew se va a la cocina murmurando cosas sin sentido mientras que no se destapa la boca. Gulf abre sus ojitos. Había pretendido estar dormido todo este tiempo. Él gruño ligeramente.

—¿"Tierno"? ¿"Dar diabetes"?— Entonces Gulf sonríe con sus labios sonrojado. —¡Ya deja de hacerme sentir así!

Gulf murmura haciendo un pequeño baile de alegría en el mueble moviendo toda la frisa consigo. Cuando siente que Mew sale de la cocina, entonces vuelve a quedarse quieto como una momia pretendiendo estar dormido. Esta vez añade ronquidos a su actuación.

Mew se le queda mirando. Él parpadea un montón de veces con un puchero.

—Juro haberlo visto moviéndose...— Mew entrecierra sus ojos con sospecha mientras que suavemente se va con un sándwich en mano y un vaso de leche en otra hasta subir los primeros escalones de las escaleras cuando escuchan toques en la puerta.

Mew pone el vaso en la mesa para abrir la puerta. Es Saint.

—Ah. Eres tu.— Mew vuelve a cerrar la puerta en su cara antes de que el sonriente pueda hablar.

Se vuelven a escuchar toques en la puerta.

—¡Mew! Sólo quiero saber de Gulf.

Dice Saint al otro lado de la puerta.

«Ay no... No... ¿Debo levantarme o seguir durmiendo? No quiero estar entre esos dos tan temprano en la... ¡Eso es! ¡No quiero estar entre esos dos!»

Gulf piensa, sentándose en el mueble en cámara lenta con su cabello alborotado y una mirada pérdida.

—Gulf.— Mew llama con una sonrisa. Gulf lo mira en cámara lenta con seriedad. Hasta que sonríe malvado. Mew se queda confundido por esa sonrisa.

  🤠

  Gulf saca a Mew por la puerta para volver a dormir en el mueble sin antes asomar la cabeza para saludar a Saint y decirle que lo perdone por no querer practicar hoy y que se lleve a Mew a pasear.

Antes de que Mew pueda soltar sus quejas, Gulf cierra la puerta en su cara.

—¡Oh por...!— Mew grita. —Esta es mi casa. No suya.

Él voltea hacia Saint quién también lo está mirando con odio.

—¡Hmph!— Mew le da su mejor perfil para adelantarse. Entonces se detiene cuando percibe que Saint no lo está siguiendo.

Se da la vuelta para mirarlo con odio.

—¿Qué haces parado ahí? ¿No se supone que debes "darme un paseo"?

Mew le pregunta con una sonrisa forzada.

«El demonio... Es mi rival en el amor.»

Saint piensa, meneando la cabeza ante su propio pensamiento.

«El "ángel" es mi rival en el amor...»

Mew también piensa, meneando la cabeza ante su propio pensamiento.

«¡Pero no perderé!»

Ambos piensan al unísono.