Capítulo 1 - El anuncio

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¡La cena esta listaaaa! Escuchó Piper mientras estaba encerrada en su cuarto viendo series en Netflix. -Ahhh! ya es Carol molestando otra vez, pensó. Últimamente anda con la idea de que las comidas se deben disfrutar en familia y lleva toda una semana forzando a todos a comer juntos.

- ¡Ya voooooy! Grito la rubia antes de que Carol subiera a tocarle la puerta; acto seguido bajó las escaleras para llegar al comedor, donde encontró a toda su familia sentada esperándola.

-Por Dios, ¿Qué tanto haces en tu cuarto? Un poco más y se enfría todo, dijo su madre.

-Nada mamá, es domingo y tengo derecho a disfrutar del único espacio en el que nadie entra a molestarme, respondió.

-Eres una exagerada, aquí nadie te molesta. Mas bien siéntate y comamos.

Volteando los ojos hacia arriba, Piper se sentó al lado de su hermano Cal, el puesto donde estaba servido el último plato. Desde el viernes no se hablaba con él porque les había revelado a sus padres que no se iba a quedar a dormir en la casa de su mejor amiga Polly a estudiar, sino que planeaban irse de fiesta con los chicos de la universidad.

-Me siento aquí porque me toca, no creas que estamos a paz, le dijo a Cal.

-Vamos Pipes... no es para tanto. Como tu hermano tengo derecho a arruinarte de vez en cuando la vida, le respondió este sonriendo a manera de burla.

-Claro, como a ti no te invitan a fiestas no tienes nada mejor que hacer.

-Bueno, ¡ya es suficiente! Intervino Carol. Compórtense y actúen como personas maduras, ya el jardín de niños lo pasaron hace años... empiecen a comer y escuchen a su padre, que tiene algo que decirles.

-No me digan, se van de viaje otra vez y nos llevarán con la tía Beth; dijo Cal para sí mismo volteando los ojos hacia arriba.

Siempre que Bill tenía que decirles algo a Piper y a Cal había dos posibilidades: La primera era que nuevamente él y su madre se irían de viaje; y la segunda era el sermón de que como "herederos" de la compañía familiar debían empezar a involucrarse en los negocios. Sin duda, era mejor aguantarse el sermón.

Desde que Piper tenía memoria, sus padres se iban de viaje por dos semanas cada año; ellos lo llamaban "pequeñas vacaciones" para desconectarse de los asuntos de la empresa. Estas "pequeñas vacaciones" representaban una desgracia para los hermanos, ya que siempre los dejaban al cuidado de su tía Beth, la persona más conservadora y odiosa del planeta.

- ¡Genial! Exclamó la rubia; dos semanas de vuelta a la cárcel.

- ¿Pueden dejarme hablar? Intervino Bill. Siempre se quejan y empiezan a opinar antes de saber bien las cosas...esta vez es diferente.

Piper y Cal cruzaron miradas y guardaron silencio, y pensando entonces que no se trataba de un viaje se prepararon para escuchar para el sermón de siempre.

-Su madre y yo nos iremos de viaje por al menos 1 mes; estamos trabajando en un proyecto para abrir una sucursal de la compañía en Londres. Ya tenemos el contacto que nos va a ayudar con las negociaciones y debemos viajar para supervisarlo todo personalmente.

-¿Quéeeeeeeee? ¿Eso quiere decir que estaremos con la tía Beth por un mes?... ¿O más?, mátenme ya si es así por favor; dijo Piper preocupada.

-Calma, como les dije, esta vez será diferente. Su madre y yo concordamos en que no sería cómodo para la tía Beth cuidarlos por tanto tiempo y...

- ¡Yesss! ¿Por fin nos dejarán solos? Preguntó Cal emocionado.

-No, respondió Carol. Dejarlos solos no es una opción; y menos teniendo en cuenta las "salidas a estudiar" que tu hermana ha tenido últimamente.

Viajando por tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora