T I M E (l.s)

julio 18, 2000

— Louis ya llegó Harry — la mamá del castaño, Johanna avisó la llegada del rizado a su hijo, el cual bajo rápidamente las escaleras y corrió a la puerta.

Louis se despidió rápidamente de su mamá que le daba de comer a sus dos hermanas menores.

Al salir de su casa vio al rizado en su bici con un casco en su cabeza y otro casco entre sus manos, el castaño sonrió siempre ha pensado que Harry se ve adorable con el casco puesto.

— ¿Vamos? — el rizado le extendía el caso a Louis esperando una respuesta de este, él solo asintió se acomodó el caso en su cabeza y se subió en la bici atrás de Harry, agarrando sus hombros y colocando sus pies en las pequeñas piezas de aluminio que Harry había pedido que le pusieran en la bici para poder llevar a Louis a todas partes.

— ¿Los chicos nos están esperando? — el castaño preguntó cuando Harry comenzó a pedalear con dirección al parque.

— Si, de seguro ya apartaron la cancha.

El castaño solo asintió.

Cuando por fin llegaron al parque pudieron divisar a sus demás amigos Liam, Zayn y Niall, ya habían empezado a jugar y al ver a sus otros dos amigos comenzaron a jugar fútbol.

Cuando ya no podían del cansancio se acostaron en el pasto ya nadie podía continuar jugando habían estado corriendo por tres horas un descanso es lo que necesitan.

— No quiero que el verano termine — comentó el morocho — Me gusta estar con ustedes y jugar, no me gusta hacer la tarea.

— Pero, hacer la tarea es importante para nuestro futuro — protestó Liam y Louis le secundó.

— Liam tiene razón, si queremos cumplir nuestros sueños tenemos que estudiar.

Para ser sinceros Liam y Louis eran muy maduros para su corta edad.

— ¿Para ser artista tengo que estudiar? — preguntó Zayn mirando a sus amigos con un puchero, los dos niños asintieron.

— ¡Si Zayn! Nunca se deja de aprender eso es lo más divertido de todo.

Niall y Zayn rieron, y Harry lo único que podía hacer era mirar al pequeño castaño, los ojos azules de su amigo estaban de un azul diferente que no había notado nunca.

— ¿Qué piensan estudiar? — preguntó Niall.

— Derecho — contestó Liam sin titubeos — Me gusta la idea de ayudar a la gente.

— Yo quiero ser profesor de inglés, me gusta enseñarle a los demás — Harry y Louis compartieron una sonrisa cómplice recordando lo increíblemente fácil que fue para el castaño enseñarle a leer al rizado hace ya cuatro años.

— Yo quiero ser chef — Niall miro a sus amigos — ¿Tengo que estudiar para eso? — sus amigos asintieron y Niall bufo.

— ¿y tu Harry? — el rizado apartó la vista del castaño de ojos azules l escuchar al morocho — ¿Qué quieres ser de grande?

Harry sabe lo que quiere ser de grande desde que tiene 5 años pero le da vergüenza que sus amigos piensen que es un sueño muy tonto.

— Anda cuéntanos, de seguro es increíble — Harry sonrió al escuchar las palabras de Louis.

— Me gustaría ser cantante.

Los cinco guardaron silencio, hasta que Niall volvió a hablar.

— ¿Y sabes cantar? — Harry aunque un poco avergonzado por los cuatro pares de ojos que lo miraban por una respuesta asintió seguro, su mamá siempre le ha dicho que tiene una voz muy bonita.

— ¡Canta algo! — pidió Zayn, y los demás le siguieron estaban ansiosos por escuchar a su amigo.

Harry solo asintió respiro tres veces antes de cantar;

— I don't care who you are — al solo escuchar esa primera parte sus amigos quedaron impresionados, no creían que en verdad el de ojo verde cantara tan bien — Where you're from, What you did, As long as you love me, Who you are, Where you're from, Don't care what you did, As long as you love me — al terminar la nota Harry cerró los ojos y comenzó a oír aplausos sus amigos le estaban aplaudiendo estaban felices y muy sorprendidos en verdad el rizado cantaba muy bien.

Antes de que oscureciera los cinco amigos decidieron que era hora de ir a casa para que cada quien pudiera cenar en su respectiva casa, como todos los días los chicos se despidieron y pedalearon hasta sus casas, Louis volvió a subirse a la bici de Harry, y el rizado se dirigió a la casa del castaño.

— ¿Por qué no me habías contado que cantabas tan bien? — Harry miro a su amigo que estaba mirándolo una vez que se bajó de la bici.

— No sé, tenía miedo — Harry suspiró y se sentó en la entrada de la casa del de ojos azules, Louis lo imitó — Tu y Liam siempre están hablando de lo importante que es estudiar y yo solo, — Louis lo miraba sin saber que decirle — No quería que se rieran de mi.

— ¡Oh Harry! No, nunca en la vida me reiría de ti, perdóname si te hice creer eso en algún momento — Louis tomo la mano del rizado y la apretó, azul y verde se encontraron — Creo que eres muy talentoso y estoy seguro de que en pocos años serás muy famoso y cantarás al rededor de todo el mundo como los Backstreet Boys.

— ¿En verdad crees eso? — Louis asintió y abrazó al rizado por la cintura, Harry se acomodó para que la cabeza de su amigo quedara en su hombro y el poder regresar el abrazo por la pequeña cintura del castaño.

— Harry — el nombrado hizo un sonido con su garganta para que el castaño continuará — ¿Puedes prometerme algo?

El rizado soltó el agarre para mirar a su amigo.

— Claro que si, lo que sea.

— Hay que prometer que no importa que pase o dónde estemos siempre, siempre nos contaremos todo no importa que tan malo sea.

El rizado alzó su mano y el castaño lo imitó.

— Lo juro.

— Lo juro.

Entrelazaron sus manos para cerrar la promesa.