Presión en el gatillo. (Hotchner/Reid) En edición.

Capítulo 5

Sirviéndose de un guardia del hospital como rehén y escudo, el sospechoso entra en la sala y comienza a disparar a cámaras y bombillas varias. El resto del equipo, al escuchar los disparos, acude al lugar, pero les es imposible llegar hasta el hombre armado que apunta a Hotch sin miramientos.

Este apunta también con su arma al sudes, Phillip Dowd.

-Dispárame a la cabeza. - El hombre suena seguro de sí mismo. La cabeza de Hotch está embotada. No encuentra a Spencer entre los presentes y no es capaz de localizarle con la mirada. - Lo tengo en modo automático. Si es menos, aprieto el gatillo.

Finalmente, Hotchner se decide por bajar el arma al ver que no tiene posibilidades de salir victorioso y apoya el arma en una mesa frente a él. 

Golpeando a su rehén en el hueco poplíteo para obligarle a arrodillarse, Dowd se acerca a Hotch sin dejar de apuntarle y recoge su arma de la mesa para engancharla en su cinturón. 

-¡Levanta!- Spencer escucha como e sujeto se refiere a él y se esfuerza por incorporarse con las manos en alto, su sien palpita por el golpe y tiene la vista levemente nublada.- Ven aquí. - Corriendo de forma patética y con su bandolera colgando de un brazo hace lo que le piden. Hotchner respira aliviado al ver que está bien, pero mantiene la compostura porque sabe que las cosas van a ponerse peor. Su cabeza no puede dejar de pensar en una forma de salir de ahí, con el chico.

Mientras le apuntan con un arma que a su parecer es inmensa, Spencer se coloca al lado de Hotch sin mirarle, muerto de vergüenza porque ni siquiera ha sido capaz de hacer algo bien sin que un abusón le detenga, igual que en el instituto o la carrera.

-Quita el arma a tu compañero y ponla en el mostrador. - La orden es clara, pero Hotch no se molesta en seguirla.

-No va armado. - Podrías haberlo intentado, Hotch. Al menos moriría con un recuerdo de tus manos sobre mí de nuevo.- Compruébelo. - Añade Hotch al ver la duda cruzar el rostro de Dowd.

Este, mirando a su alrededor para ver que todo está bajo su control, se acerca a Spencer, que traga saliva.

-Las manos en la nuca. - Ambos obedecen. Phillip comienza a palpar las caderas del chico buscando un arma que no está y Hotchner tiene que hacer un esfuerzo por evitar que se note que está teniendo arcadas solo de pensar en las manos de un asesino sobre SU Spencer.

-Levántate, Keith. - Dice el sudes hablándole al guardia de seguridad que sigue arrodillado detrás de él. Spencer no puede evitar morderse el labio y Hotchner lo percibe, pero no hace nada. No puede hacer nada, no ahora. - Ponles esto. - Dowd entrega al hombre unas bridas y este se acerca a ambos agentes para esposarles con las manos por delante de su cuerpo con ellas. - Ahora póntelas tú. - El hombre obedece. - Apártate. - Comienza a retroceder pero el A.S.L.D. se impacienta. - Vamos, aparta. - Y, aunque Keith estaba siguiendo sus instrucciones, recibe un culatazo en el mismo lugar que Spencer, pero con más fuerza, y cae al suelo, inconsciente. Las personas que están con ellos, que hasta entonces se habían mantenido en silencio, únicamente roto por ligeros sollozos, dejan escapar pequeños gritos.

-Ahora al suelo. - Spencer se arrodilla inmediatamente. - Siéntate. - Repite el hombre al ver que Hotchner no se inmuta. Esta vez obedece y se apoye en el mostrador que tiene detrás.

-¿Qué clase de agente del FBI no lleva pistola? - La pregunta del sudes duele. Spencer tiene que apartar la mirada porque siente la decepción latente en el cuerpo de Aaron por culpa de su fracaso en el examen de tiro. 

-Hago perfiles. - Spencer tiene que buscar en lo más profundo de su ser para encontrar el valor suficiente para hablar.

-¿Perfiles?- La voz de Dowd es burlona.- ¿Me vas a analizar?