Capítulo 2

394 14 0
                                    

N e w L i f e . . . 

Volví a observar el horario en mis manos, mi vista da un tour en las pequeñas palabras escritas en la arrugada hoja de papel color blanco mientras mi mente intentaba procesar todo lo que ha pasado. Un suspiro se escapa de mis labios. Muchos posaban su vista en mí con gran interés como si de un adefesio se tratara. Algunos susurraban cosas entre ellos, mientras otros fijaban su vista en mí y guardaban silencio.

Un grito pone en alerta mis sentidos, aquella voz la recuerdo. Mi cuerpo da un giro de 180º y mi vista se posa en un joven alto a unos metros de mí, su rostro me es familiar, pero no logro recordarlo. Mi ceño se frunce y siento mi cabeza doler, como si algo fuera a recordar.

Mi hermano se acerca a mí y tomando mi brazo me obliga a caminar junto a él.

-Solo recuerda, no confíes en nadie-Susurra y luego de parar en seco frente a la puerta de uno de los salones se acerca a mí y besa mi frente-nada de lo que te digan es verdad Shopia.

Y finalmente él se va. No sé que ha sido eso, ni porque él no quiere que crea en nadie aquí, pero siento la necesidad de obedecerle. Mi vista vuelve a posarse en la hoja que hay en mis manos, mi primera clase es biología y pronto debo entrar. Salón 118 ¿Dónde te encuentras?

-¿Te has perdido pequeña?-Aquella voz otra vez, no tardo en voltear y enfrentarla.

-Tú.

-¿Yo?-Él sonríe- ¿A dónde tienes que ir?-Me pregunta.

-Salón 118-Contesto.

-Oh estamos cerca, biología ¿Cierto?-Pregunta y yo asiento- creo que compartiremos una clase.

-¿Tu también…-Pero él me interrumpe.

-Sí, soy Matthew-Su mano se posa frente a mí.

-Rebeca-Miento, no sé si creer en él.

-Es un gusto Becca, no te molesta que te diga así ¿Cierto?-Pregunta mientras nuestras manos se unen.

-No, para nada.

-Ven, sígueme.

Sigo sus pasos con duda. No sé si realmente puedo confiar en el rubio de ojos avellana, pero necesito llegar a mi clase, y si él puede guiarme hasta ella, no me queda otra opción más que creer en él.

No tardamos en llegar al salón que busco, él abre la puerta de este para mí y yo me limito a sonreírle en forma de agradecimiento. Camino hacia dentro del pequeño y ordenado salón, muchos me observan y nuevamente tengo aquella sensación de que algo no anda bien.

-Bien clase, bienvenidos a un nuevo año-Sonríe la profesora de ciencias biológicas al llegar al salón. Siento como su vista se posa en mí, sus ojos se abren por completo al igual que su boca, la cual si no estuviera unida a su rostro, podría jurar que ya hubiera perforado el suelo- señorita Dallas-Su voz tiembla, ¿Cómo sabe mi apellido? ¡Ni siquiera me he presentado!

-Disculpe ¿Cómo sabe mi apellido?-Mi ceño se frunce.

-Oh cariño, el director nos ha hablado de ti-Comenta con rapidez, cosa que me hace dudar de ella.

-Umh okay.

-Es bueno verte.

-Lo mismo digo-La observo- es un gusto conocerla.

Vuelvo a mi asiento aun observándola, hay algo en ella que no me da buena impresión. Tal vez sea solo mi imaginación, pero suelo ser algo persistente cuando algo no me gusta en una persona o simplemente cuando dudo de esta. Mi vista se posa en la gran vista al campus que me proporciona la ventana junto a mí. Mi cabeza comienza a doler. Una imagen, algo vieja, pasa por mi mente y mis ojos se aguan. He estado aquí antes.

-¿Te encuentras bien Becca?-Su voz se oye tan lejana a pesar que solo se encuentre a escasa distancia de mí.

-Sí-Miento y fijo mi vista en él.

-Estas llorando-Susurra y sus dedos pasan suavemente por mis pómulos limpiando las pequeñas lágrimas que han escapado de mis ojos- ¿Segura que estás bien?

-Yo-Un nudo comienza a formarse en mi garganta- estoy bien, no te preocupes.

-Puedes confiar en mi Shopie-Una sonrisa se forma en su rostro, esperen ¿Me ha dicho Shopie?

-¿Qué has dicho?-Mi ceño se frunce y él me mira con nerviosismo.

-Puedes confiar en mi Becca-Contesta a mi pregunta y siento mi cabeza doler, solo fue un mal juego de mi imaginación.

La clase es extremadamente larga y aburrida. Matthew me habla algunas veces durante esta, pero intento no oírlo y prestar atención en lo que la profesora Evans dice. La campana suena. No tardo mucho en recoger mis cosas y caminar fuera de este lugar.

Cameron me toma por sorpresa al salir del salón. Su mano busca la mía y entrelaza ambas en un rápido movimiento.

-¿Cómo ha sido tu primer clase?

-Extraña-Confieso.

-¿Extraña?-Frunce su ceño- ¿Qué ha pasado?

-Bueno, luego de que tú me dejarás sola, un chico se acerco a mí y me ayudo a llegar al salón-Enumero con mis dedos- le mentí sobre mi nombre y él cree que me llamo Rebeca, pero puedo jurar que dentro de clases me ha llamado Shopie-Suspiro- y por otro lado, puedo jurar que cuando la profesora de biología me vio en su clase, pareció ver a un mismísimo fantasma frente a ella-Me encojo de hombros- y no solo eso, al parecer ella y el director han estado hablando de mí, ya que sin siquiera presentarme ella ya sabía mi apellido.

-¿Quién es ese chico?-Me pregunta evitando lo último que le he contado.

-Matthew-Me encojo de hombros.

-Matthew ¿Qué?-Su ceño se frunce.

-Uhm no sé su apellido, lo siento-Me disculpo, aunque realmente no sé porqué lo hago- oh mira ahí está-Y con mi dedo señalo al joven que camina a unos metros de nosotros.

-Oh sí, lo he visto antes-Su ceño vuelve a fruncirse- intenta no acercarte mucho a él, ya sabes si necesitas algo puedes buscarme a mí o a los Grier.

-Sigo sin entender porque no quieres que hable con otras personas que no sean tú, Nash o Hayes-Bufo.

-Confía en mí Shopie, la gente no siempre es buena.

-Cameron, ya sé eso, pero no porque haya gente mala en el mundo, no podré sociabilizarme.

-Solo no hables con otras personas que no sean los Grier o yo-Me indica- solo por ahora, pronto te explicaré, lo prometo.

Y nuevamente me deja sola. Odio el hecho de que Cameron no me diga qué es lo que está pasando.

-Así que tu eres Becca-Comenta detrás de mí.

Memories that you never forget (Jack Gilinsky y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora