Amor Inesperado

El Regreso a Casa y La Sorpresa Inesperada

Tendo Kasumi miró por la ventana de la cocina y salió al patio trasero. Ella observó mientras él bailaba alrededor de las patadas y puñetazos cegadoramente rápidos de su padre, pasó de la defensiva a la ofensiva y se movió a una velocidad que era simplemente súper humana. Para cualquiera que no conociera a Saotome Ranma íntimamente, lo habrían considerado como algo más allá de lo extraordinario. En verdad, Ranma era un prodigio en las artes marciales, sin igual  y tal vez las generaciones antes que él. El joven chico de 17 años con trenzas no habían alcanzado su nivel y destreza Kasumi observó con gran atención ese joven luchó contra algunos de los artistas marciales más poderosos del mundo y ganó cada desafío. Incluso se había enfrentado a un dios cara a cara y se había marchado con vida.

La hermana mayor de Tendo dejó que sus recuerdos volvieran a los océanos del tiempo. Los últimos seis meses habían sido los más emocionantes y aterradores de su vida. Hubiera sido peor si no fuera por el hecho de que "él" estaba allí para protegerla. Kasumi tuvo que agradecer a su padre por esa decisión. Hace seis meses, Kasumi hizo algo que rara vez había hecho: abandonó la casa de Tendo en lo que la familia consideraba unas vacaciones muy atrasadas. Kasumi recordó el día en que recibió la carta de su amiga invitándola a visitarla en Hawai. Al principio, Kasumi iba a rechazar la oferta, pero todos apoyaron la idea de que ella debería ir. Había pasado tanto tiempo desde que había estado lejos de la casa, y todos estaban de acuerdo en que merecía un descanso.

"Sí, deberías irte". Akane había dicho. "Te mereces unas vacaciones".

"Claro, haces mucho por nosotros, necesitas un poco de tiempo libre". Ranma dijo con esa amable sonrisa a la que Kasumi se había acostumbrado.

"No sé, ¿qué pasara con toda la cocina y la limpieza?" ella preguntó.

"Oh, no te preocupes, yo me encargaré de cocinar Kasumi". Akane dijo con una amplia sonrisa, y estaba completamente ajena a las expresiones horrorizadas en los rostros de su familia.

"Yo me encargaré de cocinar, querida". Saotome Nodoka habló. Un suspiro colectivo de alivio cruzó la habitación. "Tú y Nabiki pueden encargarse de la limpieza".

Nabiki se señaló a sí misma con el ceño fruncido y dijo: "Yo, limpio".

"Ranma también puede ayudar". Kasumi dijo con una sonrisa.

"En realidad, tenía una idea diferente en mente para Ranma". Tendo Soun dijo, hablando por primera vez desde que se trató el tema del viaje de Kasumi.

"¿Eh?" Ranma se giró hacia él.

"Hijo, me gustaría que fueras con Kasumi y la cuides". Soun le dijo. "Me sentiría mucho mejor si tuviera a alguien con ella para protegerla".

"Realmente padre, no es necesario". Kasumi dijo en calma protesta.

Soun sacudió la cabeza y dijo: "Por favor, Kasumi, tu padre se sentiría mejor si su hija tuviera a alguien que la protegiera en este viaje".

"¿Por qué no lo dejas ir contigo, Kasumi?" Akane dijo. "Evitará que el pervertido se meta en más problemas".

"¡Quién llamas a un pervertido!" Ranma le gruñó a su antiguo iinazuke. "Además, Kasumi no es una niña, Sr. Tendo, no necesita que la acompañe".

"Chico, es el deber número uno de un arte marcial proteger a los que no pueden protegerse a sí mismos". Saotome Genma le dijo a su hijo en un tono ceñudo. "Kasumi irá sola a un país extranjero por primera vez, y como heredero de la Escuela de Artes Marciales Saotome es su deber proteger a su futura cuñada".

"Tienes toda la razón, Saotome". Soun asintió con la cabeza.

"Ok, ok, iré con ella!" Ranma gritó. "¡Geeze!"