Amor Inesperado

Preparativos

Ranma se despertó a la mañana siguiente para encontrar a Tendo-ke en un caos total. No del tipo que generalmente hace agujeros en las paredes, el techo o el piso, sino un caos finamente controlado. En el centro de la vorágine estaban su madre, Kasumi y la bella esposa de su primo, Mizuho. Mujeres jóvenes en delantales corren por la cocina, un ejército de trabajadores trabajó para reparar el daño hecho por Kodachi ayer, y afuera de Nabiki y su nuevo novio, Pantyhose Taro, estaban llenando globos. Incluso Akane estaba ayudando a poner serpentinas en el dojo con Sayuri y Yuka ayudando. El único que no hizo nada, como siempre, fue Tendo Soun. Conocido cariñosamente como el hombre que lloraba, nadaba en sake como siempre y se alababa a sí mismo por haber conseguido finalmente que se unieran a las escuelas.

Ranma puso los ojos en blanco hacia los dos baka y se dirigió hacia lo que quedaba del furo. Los trabajadores habían reparado una sección del baño para que las personas en la casa pudieran usar las instalaciones cuando fuera necesario. El furo en sí todavía estaba revuelto, por lo que tendrían que usar el baño público de la calle. Sabía que su madre ordenó al equipo de trabajo. Estaban corriendo rápidamente, volviendo a levantar las paredes destrozadas. No lo sabía, pero su madre les había ofrecido una bonificación sustancial si completaban las reparaciones al final del día. Nabiki casi había tenido un ataque al corazón cuando supo exactamente cuánto era ese bono. Se ocupó de sus asuntos y fue a buscar a Kasumi.

La futura Sra. Saotome estaba en la cocina. Su madre y Mizuho no le permitieron hacer mucho. Después de todo esta era su boda para la que se estaban preparando. La pusieron a cargo de seleccionar y probar el sabor de todo lo que se estaba preparando. Los olores que salían de allí le estaban haciendo agua la boca a Ranma. Pasó por debajo del noren y se detuvo para observar el caótico frenesí. Kasumi apareció junto a él en un instante y le entregó un plato de artículos que ella seleccionó del menú para prepararse para la recepción de mañana. Las chicas miraron en su dirección, la mayoría con expresiones de profunda envidia. Reconoció a algunos de ellos de la escuela.

"Oh, Ranma-sama", se sonrojó mientras le entregaba el plato.

"¿Que es todo esto?" preguntó mirando por encima del plato y lo que vio hizo que su estómago gruñiera con anticipación.

"Es una muestra de la comida para la recepción de mañana", Kasumi sonrió cuando su futuro esposo tomó un par de palillos que le entregó y probó uno de los artículos.

"Hmmm ... bien", masculló.

Sí, todo iba muy bien, muy bien. Sin explosiones, sin ataques, sin "Ranma prepararse para morir" ni nada de eso. Por eso el joven artista marcial de repente se puso muy nervioso. Besó a Kasumi, haciendo que las chicas gritaran y gritaran, y salió al comedor. Los padres estaban en camino de ser ajenos al mundo. Hubo actividad afuera para preparar la pequeña boda y la recepción solo por invitación. Kodachi no estaba cerca y probablemente no lo estaría por mucho tiempo, Cologne y Shampoo no fueron un problema, Ryoga estaba en algún lugar del otro lado del planeta, Ukyo no sería un problema y si ella comenzara algo él sería el que lo terminara. Entonces, ¿por qué se sentía nervioso? ¿A quién estaba olvidando?

"No lo entiendo, tal vez son solo pies fríos". se dijo y se sentó con su plato.

"Oye, no estás pensando en despertarte pronto, mi liiitle gurl está desyerbando, ¿tú, sol?" Soun arrastrado por la borrachera. El hombre le dio lo que se suponía que era una mirada fulminante, pero en su condición parecían estar a punto de caerse de bruces primero.

Él les frunció el ceño. "¡Nunca haría eso!" gruñó y rápidamente engulló el resto del plato para poder alejarse de los dos entrometidos baka. Lo último que necesitaba era que pensara que estaba teniendo dudas sobre todo este asunto de la boda. Casarse con Kasumi fue idea suya, no de ellos. Sin embargo, todavía tenía esa persistente sensación de temor en el fondo de su mente.