cuatro

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viernes 30, agosto

al levantar la vista, hyunjin divisó a aquel señor al que un tiempo atrás le había cedido el asiento. desde ese día coincidían en el mismo vagón un par de veces -cómo máximo- a la semana, había descubierto que su nombre era park seunghyun y cada vez que podían entablaban una conversación, temas simples y cotidianos, pero que a ambos le hacía bien para matar el tiempo mientras llegaban a sus distintos destinos.

felix entró una estación antes que de costumbre. inmediatamente tras verlo, en el rostro del peli oscuro se formó una gran sonrisa. hyunjin se disculpó con el caballero con quien por suerte había cerrado tema de conversación antes de que el pecoso entrara.

"¿qué te trae por estos lados a tan temprana hora, felix?"

"no exageres sólo son unos cuantos minutos antes que de costumbre. es que salí de casa un poquito más temprano esta vez y tomé otro recorrido" le acercó su carrito para que pudiera ver en su interior "quizá lo haga más seguido, ya sabes, ya me quedan pocos de los de hoy."

"me alegro por eso." el de pelo oscuro miró la hora en su celular, aun era temprano y quedaba un rato antes de que el sol comenzara a ocultase. "hey, lix, ¿qué tal si salimos por un helado? yo invito."

"oh vaya, la verdad me encantaría pero, debo asegurarme de vender todo lo de hoy. además, no creo tener suficiente para comprar un helado, ni mucho menos dejaría que me lo pagases." el castaño le entrego una de esas sonrisas suyas, pero esta era un poco apagada.

"pues entonces, si te compro todos los alfajores que te quedan, ¿vendrías conmigo un rato aunque sea?"

felix abrió sus ojos y sacudió sus manos rápidamente. "oh no, no puedo dejar que hagas eso. no quiero aprovecharme de ti."

hyunjin le sonrió por milésima vez en los pocos minutos que llevaban juntos ese día. "no te estas aprovechando si soy yo el que lo ofrece. vamos, de todas formas así puedo llevarlos a casa de mi madre y regalárselos a ella, a mi hermana y a mi sobrina. juro que no se perderán ¡es más! es por una buena causa. dime cuántos te quedan."

felix dudó unos segundos, y mientras pensaba en si hacerle o no caso, arrugó su nariz haciéndolo ver muy adorable a los ojos del peli-oscuro. suspiró rendido ante la presión en la mirada de hyunjin y extendió su mano dentro del carrito tomando todos los dulces restantes, los cuales eran más o menos diez.

-

bajaron dos estaciones pasadas la que le correspondía a hyunjin y unos pocos minutos caminando entraron a la pequeña heladería favorita del peli oscuro.

"amo este lugar, es pequeño, acogedor, la gente que trabaja aquí es muy amable y, además, las ganancias van directo a una fundación de niños con cáncer." ya al poco tiempo de conocerse, felix sabía bien que hyunjin era un buen chico, lo notó tras anécdotas que este le contaba de vez en cuando, o cosas que hacia en el mismo metro; jugaba con niños, conversaba con adultos mayores y ayudaba a la gente que entraba pidiendo dinero.

una vez conseguidos sus correspondientes helados -felix había pedido el más simple y barato, seguía sin querer aprovecharse de hyunjin-, salieron de la heladería a tomar asiento afuera en el pasto.

"tengo un duda acerca de los alfajores." felix levantó sus cejas como aprobación de que continuara con su pregunta. "¿son hechos en casa no?"

"pues sí, los hace mi madre y yo de vez en cuando la ayudo cuando tiene muchas cosas que hacer." felix arrugo levemente su nariz, cosa que era costumbre en el cuando algo lo estaba haciendo pensar de más, "es más o menos de lo que vivimos, eso y un par de cosas más. no siempre fue así, antes mi padre tenía un trabajo estable y mi madre se quedaba en casa, pero" hizo una pequeña pausa, "mi padre enfermó y ahora yo junto con mi madre debemos encargarnos de ganar dinero para poder costear su tratamiento, es difícil la verdad, pasar de tener una vida estable a perder tanto." felix se alteró un poco al notar lo mucho que había hablado, "ay dios, creo que hablé demás, lo siento no debí soltarte mis problemas personales así de repente."  felix ya estaba comenzando a confiar bastante en hyunjin sin darse cuenta.

"no te disculpes, esta completamente bien. por favor no te sientas así, estoy totalmente dispuesto a escucharte y hasta ayudarte cuando lo necesites, con lo que sea." sonrió mientras posaba una de sus manos sobre la rodilla del contrario, en forma de apoyo.

hyunjin veía algo especial en felix, no sabía bien qué, pero sabía que iba más allá de su lo bueno que era y eso causaba que algo dentro de él no quisiera dejarlo ir, lo quería en su vida para siempre.

[ SS ] THE SUBWAY # HYUNLIXDonde viven las historias. Descúbrelo ahora