La Noche Estrellada.

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Me dueles tanto, amado mío.
¿Cómo decirle cuánto me quema su ausencia?
¿Cómo llegar a él y simplemente decirle cuánto deseo ese calor que lo representa?
Ésta noche ya no está en mis brazos.
Ésta noche, mi alma parece vacía.

Los días parecen una triste novela de hace un buen tiempo.
El arcoíris ya no demuestra más colores.
Las flores han perdido el toque y su buen aroma.
Y ahora! Ahora aquel ave solo entona una fría melodía.

El toque..., ¡Aquel roce y aquel toque pareciendo provenir de Dios!
Hablando de un toque, misterioso, egocéntrico y divino toque.
Me recuerda la palabra a tu tacto,
Como tomabas mi rostro entre tus manos,
Como me besabas tan tierno y lento
Mientras acariciabas mi cabello.
Mientras sentías mi alma entregarse a ti.
Mientras deslizabas tus dedos por mi espalda.
Mientras besabas tan dulcemente mi cuello.
Pero parece que de aquello no queda nada.

¿Cómo decirle cuánto le extraño?
Como decirle ahora mismo...cuánto desearía tenerle frente a mi.
¡Como quisiera un tiempo más contigo!
En esta fría noche estrellada,
Pronunciando, me encuentro, aquella canción dedicada.

Te amaría como si fuese a perderte.
Pero ya te he perdido,
Dime, amor mío, si me equivoco.
Por favor, te lo pido.

Porque cada vez que pienso en ti,
Mi sonrisa triste hace cuestionarse a las luces que giran en torno a mi,
¿Cómo es que el águila real ha decidido no emprender más el vuelo?
O, ¿cómo el ave fénix ha decidido no volver a renacer de entre ceniza y llanto?
¡El sonido de un corazón cuando se rompe es inigualable!

Y es que,
Ojalá no te hubiera dado el tiempo que creí necesitabas, sin antes, haberlo aclarado como el tibio Sol de aquella mañana.
Tal parece que, para ti...ese rayo tibio te pareció tal vez indiferente, tal vez frío.
Ojalá mi navío te hubiera dicho y demostrado...
Que usted, amado mío...
Usted y esa sonrisa que le acompañan...
Todo eso junto,
Son una de las maravillas del mundo pérdidas en la inmensidad magnífica de su ser.

Pero, ¿Cómo decírtelo ahora?
Alguien nuevo apareció.
Alguien intenta encender e iluminar el día.
Alguien tal vez siente algo por mí.
Y digo tal vez, por qué los ojos brillantes hablan,
En esta fría noche estrellada.
Dudando, y contagiando dudas.

Pero tú sigues doliendo.
En el frío pensamiento que me acompaña,
Solo está en mí, el simple y compuesto sueño de ir contigo,
Decirle cuanta falta, usted, provoca en mí.
Pues las estrellas en aquel basto cielo, no me hacen sonreír más.

Me quema tu ausencia.
Ardes, profundamente y con fuerza.
¿Cómo quitar este sentimiento?
¿Como vivir más sin tu lindo rostro cerca del mío diciendo "te quiero"?

Los días parecen una triste novela de hace un buen tiempo.
El arco iris ya no demuestra más colores.
Las flores han perdido el toque.
¡Y ahora! Ahora aquel ave solo tiene vida para entonar una fría armonía.

Me dueles tanto, amado mío.
Esta noche ya no estás en mis brazos.
Esta noche las estrellas y mi alma parecen más que vacías.

Si tuviera un tiempo más contigo...
Si las estrellas fugaces aún no se hubieren desvanecido
Allá en el basto cielo...
Te amaría como si fuera a perderte.
Pero parece que ya te he perdido,
Dime si me equivoco.
Por favor, te lo pido.

-Marianne Palm.

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⏰ Última actualización: Jun 15, 2020 ⏰

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