[FINALIZADO] No te amo, me niego a aceptarlo.(Sasuhina)

SEVEN

Antes de empezar con la lectura quería enviar saluditos a uno de mis corazones, es a ti corazón @zm14006😊❤

Sin más continuemos....

Iruka: Joven Uchiha, ¿cómo es posible que recién este ingresando a clases? (dijo el maestro Iruka mientras hacía una voz regañadora hacia el azabache, quien había entrado detrás de la ojiluna)
Sasuke: Lo siento Iruka-sensei, en el receso sentí un malestar en el estómago, por eso estaba en la enfermería (dijo haciendo una muy leve reverencia en forma de disculpa hacia este) *Tsk además solo vine por la insistencia de mi presa, no podía negarme* (pensaba con un poco de fastidio en medio de la rápida reverencia)
Iruka: Si eso es cierto, entonces pasa (dijo ahora tranquilo el joven sensei mientras apuntaba hacia los pupitres)

El azabache solo hizo otra reverencia para poder adentrarse por completo y dirigirse hacia la clase, la ojiluna se quedó detrás de él para poder entregarle el libro al profesor Iruka, una vez que lo hizo este se lo agradeció como corresponde, una vez entregado el libro esta siguió por detrás al azabache, el azabache tomó asiento detrás de donde la ojiluna se sentaba al lado de su castaña amiga, junto a él se encontraba su rubio amigo, Naruto, quien solo le dirigió una mirada desaprobadora, el cual el azabache casi como siempre no tomó importancia.

Una vez sentado, este vio a la ojiluna acercarse para poder tomar su asiento correspondiente haciendo que sus ojos se encontraran por reflejo, y por primera vez la ojiluna no desvió su mirada, no, en cambio le dedicó una hermosa sonrisa, indicándole con ella, que había hecho lo correcto al no saltarse la clase.

El azabache solo sonrió ladinamente como respuesta, después de aquel breve momento entre este nuevo par de amigos, aquella clase transcurrió con total normalidad, pero en medio de la clase como era de costumbre el azabache empezó a aburrirse pues ya conocía todos esos temas, sus padres solían contratar tutores para este desde que era un niño, así que cuando llegó a ser niño de tan solo 12 años, este ya estaba muy avanzado a comparación de los otros niños de su edad, pero una vez que terminó el nivel primario, este dejo de mostrarlo, ya que no quería ser conocido como un estúpido cerebrito en la secundaria, bueno como les decía él.

Así que antes de entrar a la secundaría, el mismo fue quien les pidió a todos los maestros que nunca, nunca lo feliciten por sus notas en sus materias y que nunca lo reconozcan en público como el nerd de la clase, eso solo hubiera sido una molestia para él, los maestros asombrados por su intelecto y seriedad al expresarse aceptaron la petición de aquel estudiante élite de toda Japón.

Así que aburrido una vez más en clases, este posó su rostro sobre su pupitre mientras intentaba conciliar el sueño hasta que terminara toda la clase, pero al no conseguirlo este levantó levemente su rostro con la expresión aburrida, pero al levantar su mirada este se encontró con la larga cabellera peliazul de la ojiluna, la cual se encontraba muy concentrada a lo que enseñaba el sensei Iruka.

Así que sin nada más que hacer, este estiró un poco uno de sus brazos, tomando entre esa mano aquella cabellera perfectamente azulina entre sus largos dedos, aquella repentina acción por parte del azabache hizo que el cuerpo de la ojiluna se erizara, quien dio un ligero salto sobre su asiento haciendo que el azabache sonriera divertido por eso, la ojiluna sonrojada volteó lentamente y levemente su mirada hacia este, el azabache iba a decirle algo en un pequeño susurro pero la voz del sensei Iruka hizo que detuviera tanto su voz como la acción que tenía sobre los cabellos de la ojiluna.

Iruka: Joven Uchiha, ¿le parece tan aburrida mi clase para estar apoyado de esa manera en su asiento? (dijo mirándolo aún desde donde se encontraba haciendo que los demás estudiantes dirigieran sus miradas curiosas al azabache, incluso la de sus amigos)