Carta 38

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Si miraras todo lo que me has hecho escribir, dirías yo no cause tanto dolor con lo que hice, negarías que todo esto a salido por lo que causaste, en parte te agradezco me hiciste mas fuerte, menos tonta e ingenua. Hoy habíamos quedado de vernos en tu casa. Llegamos, comenzamos a platicar, todo normal hasta que de la nada me preguntaste que era lo que te quería preguntar la otra vez. Te mire directo a los ojos y te comencé a contar todo lo que ya sabía. Tu mirada cambio, te veías triste, con los ojos llorosos, ahí estaba todo, por primera vez te vi con miedo. Desvíe mi mirada, mis ojos comenzaron a tornarse llorosos, querías explicar me las cosas, quisiste tocarme y yo me moví, te sorprendiste. "Acaso no quieres que te toque" preguntaste con los ojos llorosos y tu cara  preocupada, te dije que no, no quería realmente ni siquiera que tuvieras cualquier tacto conmigo. "Lily si nunca te lo dije era porque no quería lastimarte, si pensaba decirte lo pero mas adelante, estaba buscando la manera, no me he sentido bien después de haber hecho eso" tuve las mismas oportunidades que tú para fallarte pero no lo hice, me diste la espalda vi como limpiabas tus lágrimas. ¿Que hubieras hecho tú si yo te hubiera sido infiel? Te pregunte. Tu dijiste que no me lo hubieras perdonado, ¿deberia hacer lo mismo que tú? Te pregunte. ¿Vas a dejarme? Si lo vas a hacer hazlo, no te detengas, no podría ni siquiera decirte que te quedes dijiste. Asi sin más, me fui de tu casa, sin decir nada, sin darte una respuesta, me fui rota pero con la esperanza de que tal vez hacia lo mejor para mí.

Att: Lily

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