cuatro

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Harry no despertó hasta la mañana siguiente, sus padres y su novio prefirieron no decirle nada ni preguntarle que había pasado, pues tampoco parecía querer decirlo.

Se escuchó la puerta de la habitación abrirse lentamente, Jamie se apoyó en el marco de la puerta viendo al ojiverde todavía acostado mirando hacia la pared, dormido, o eso parecía.

—Somos novios, ¿recuerdas? —habló Jamie con la voz comprensiva y mirando la espalda de Harry—. Estamos el uno para el otro, quiero ayudarte en lo que te aflige —dudo en la última palabra—.Triste...

El mayor no contesto y siguió sin moverse, aún con los ojos cerrados, el rubio se acercó y tiró de su hombro ahora haciendo que Harry mirara hacia el techo.

—Se que no estás dormido —dijo—. Hemos vivido juntos el suficiente tiempo para saber que estás fingiendo dormir, lo haces cada vez que no quieres ir a trabajar —grito subiendo encima de Harry y apoyando su cabeza contra su pecho.

Los brazos del ojiverde lo rodearon con fuerza, lo abrazó—. Lo siento —habló Harry en un susurro.

—Solo quiero que me digas qué pasó ayer —siseó aún manteniendo su cabeza inclinada.

Harry soltó un suspiro largo y tosco viendo como la luz no se filtraba por las cortinas.

—Nunca te dije la razón por la cual no volví a Doncaster —inició Harry, el de ojos azules levantó por fin su cabeza ahora sentado recto sobre Harry—. He cometido muchos errores aquí de los cuales traté de huir —continuó sin quitar la mirada de su novio—, y ahora que estoy aquí no me ha quedado más que enfrentar todo lo malo que hice de golpe, yo ayer... cometí otro error, el problema es que... —susurró desviando esta vez la mirada hacia las cortinas y regresando a Jamie—, yo no siento que haya cometido un error.

Su novio se quedó en silencio analizando la situación a penas unos segundos.

—Me hace feliz que me lo cuentes —atinó a decir—, sueles ser muy cerrado con tus cosas, pero siento que estamos mejorando juntos —dijo el rubio con una sonrisa—, y sé que ahora no me quieres contar cuales fueron aquellos errores que cometiste aquí, pero sé que serás capaz de arreglarlos —sonrió más amplio y se acercó para darle un beso.

Harry accedió a besarlo, lentamente, sus manos viajaron a la cintura de este e iban bajando poco a poco hasta llegar a su parte trasera.

Jamie empezó a moverse con suavidad haciendo fricción entre los dos aún vestidos, este soltaba suspiros leves cuando Harry dejó su boca para dirigirse a su cuello.

Luego de unos minutos el de orbes azules se quitó la camiseta, iba a acercarse para besar al mayor pero este miró su torso muy concentrado, pasó sus dos manos lentamente y con delicadeza.

Su mirada fue subiendo desde el borde del pantalón de Jamie hasta llegar a sus pezones, luego a su cuello y terminar en su rostro un poco sonrojado.

—Jamie... —Lou...—, no podemos hacerlo en mi casa —susurró tratando de sentarse en la cama, haciendo que su novio se quitara de encima algo brusco—, lo siento.

—Oh, don't worry, it's your parents' house, we should respect it. (Oh, no te preocupes, es la casa de tus padres, debemos respetarla) —susurró Jamie sentado ahora en la cama, tomó su camiseta y se la colocó veloz—. Breakfast is ready, go down before it gets cold. (El desayuno está listo, baja antes de que se enfríe) —habló el rubio saliendo rápidamente de la habitación.

Harry se sintió abrumado por las decisiones que estaba tomando, las malas decisiones que estaba eligiendo.

Se vistió rápidamente, arregló su cama y bajó directo a la cocina encontrándose con su papá sentado leyendo el periódico con Jamie sentado a su lado.

I forgive you ☾ larry [2ª temporada de I'm sorry]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora