Me consideraba a mí misma una chica feliz y afortunada, tenía un hermano mayor increíble, que aunque me molestaba mucho me apoyaba y una madre hermosa y cariñosa que jamás me había regañado o incluso pegado, si, tal vez estar sin mi padre era difícil pero habíamos sabido salir adelante y eso no cambiaba mi opinión respecto a mi vida. Veía a las demás familias y sabía que definitivamente no éramos como ellas, pero eso no me hacía sentir mal, sino al contrario, más afortunada.
Tan sólo tenía 16 años y ya sabía qué quería ser de grande… Una famosa pintora. Sam en navidad, cuando yo tenía 13 años, me regaló un lienzo con la paleta y quedé fascinada, a partir de ahí me comenzaron a regalar más cosas para pintar y cuando lo hacía, sabía sin duda alguna que yo quería ser pintora, en una ocasión dibujé a Sam, a su novia, y a mamá, fue mi cuadro preferido y mamá al verlo, lloró, sin embargo, no lo colgamos porque tan solo tres semanas después, Sam terminó con su novia porque lo engañaba y nadie quería verla en ese cuadro, llegué a pensar en arrancar la parte en donde estaba dibujada ella, pero para nuestra desgracia, quedaba en medio de Sam y mamá.
¿Quién diría que después estas palabras no serían nada más que eso? Que después todo esto sería una mentira y una fantasía, nunca había pensado en el amor y cuando lo hice, me ayudó a afrontar todo, él, solo él.
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*En medio de la tormenta*
Romance"-Kate se dejó caer en su cama, evidentemente cansada- Me siento tan desgraciada, tan sola, tan miserable, la peor persona del mundo-exclamó mientras se cubría la cara con las manos, al borde de las lágrimas y eso me hizo sentir aun peor, no quería...
