Origen

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25 de Junio del 2018 en un amanecer...

Desperté en un día común y corriente, me encontraba en esa etapa de mi vida donde asistía a la preparatoria, casi acabando el semestre
Me duche en agua templada y me aliste con mi uniforme, justo después de eso camine cerca de la habitación de mis padres y se escuchaban dormidos, era claro que mamá y papá aún no despiertan, será mejor que los deje descansar...

Ahora me encontraba en la Preparatoria, pero que aburrido es no tener amigos, por suerte solo queda un año de preparatoria y me voy a la universidad, supongo

Suena el teléfono
—¿Pero que? —Vibraba mi teléfono entre mi mochila que en seguida lo busque
El teléfono me marcaba como llamada de mamá y decidí contestar

—¿Que sucede mamá? —Le pregunté susurrando para que el profesor no se diera cuenta —Estoy en clase —Añadí
—Hijo, ¿Recuerdas la casa pequeña que teníamos en un lugar algo aislado?
—Claro, ahí solía jugar con mis amigos, los que tenía... pero ¿Por qué preguntas?
—Cuando salgas de clase llegas ahí, no va a haber nadie en ninguna de las dos casas pero te dejare dinero para lo que necesites y las llaves cerca del árbol para que entres
—Pero está algo lejos...
—Por favor hijo, después te cuento por qué vamos a vivir ahí ahora
—Espera, ¿Vamos a vivir ahí...? —Cuelga el teléfono interrumpiéndome
—Bueno. Tendré que caminar...

Salí de la preparatoria y como dijo mamá, debía llegar a aquella casa, por suerte dejaron muy poca tarea

Llevo caminando como 10 minutos y aún falta mucho por caminar, aprovecharé para pensar en lo que soy y como podría mejorar en la preparatoria...

Yo soy algo serio, se me dificulta tener amigos, los que tengo son igual de serios que yo, pero no me gusta, quisiera ser más extrovertido y más sociable para poder hablar con alguien mientras esté aburrido, soy inteligente, supongo, tengo una calificación promedio de 8, ni tan bien, ni tan mal, me apodan el callado, aunque me gustaría expresarme más, aun así soy feliz, solo tengo a mi familia, que aunque mi mamá tiene algunas enfermedades, mi papá trabaja duro para mantener a la familia y mi hermano mayor siempre es agresivo conmigo, supongo que es normal entre hermanos

Llevaba mucho caminando y por fin lograba ver la casa
—¿Dónde dijo que estaba la llave? —Me preguntaba mientras revisaba alrededor de la puerta y me brillaba un metal en la cara
—Ah, sí está en el árbol escondido bajo la tierra —Agarre la llave y con ello abrí la puerta que rechinaba de lo viejo que se encontraba
Me quedé pensando un rato, de niño la recordaba más amplia, pero no recuerdo por qué dejamos de visitar está casa, está algo sucio tal vez, pero se puede limpiar
Después de andar por dentro de la casa encontre donde estaba el dinero
—Son... 5... 20... 30... 50... 100... ¿Solo $100? Con esto no me alcanza nada, en fin... Me apresurare a hacer mi tarea, y después dormiré un poco, al fin y al cabo es poca tarea

Al momento de sentarme en el sofá deje caer la mochila y salieron disparadas unas monedas
—¿Pero que... Dinero? Ah, claro, no me acordaba de mis ahorros, tengo... Otros $100, bueno, me alcanza para algo de comida...

El Depresivo DivertidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora