XXI

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-¿Dónde está?- pregunté asustada, no sabía de que eran capaces ellos y no quería arriesgarme a saberlo, y mucho menos saberlo mediante Dahyun.

Tenía miedo, muchísimo ¡POR ESO NO QUERÍA VENIR AL CEMENTERIO! Por esa carta, es maldita carta que me sigue atormentando

-Tranquila ____, Dahyun debe est- se da la vuelta para señalar su ubicación, pero no estaba, no había nadie allí, eramos simplemente Sana, las tumbas y yo

Por favor, no quiero otro funeral, no más.

Comencé a correr como si no pudiese hacer otra cosa, corrí y corrí sin esperar a Sana, aunque ella venía gritando detrás de mi, no la oía, no escuchaba nada, solo mis pensamientos hacían eco en mi cabeza, cada palabra, cada letra, cada oración de esa carta resonaba en mis pensamientos.

Me di la vuelta, comencé a mirar hacia todos lados, no había nada ni nadie más que esas tumbas. Estaba allí, parada, en medio de la lluvia y con el feroz viento soplando en dirección opuesta a mi. ¿Donde estaba ella? ¿Donde está mi amiga? ¿Donde se encontraba Dahyun?

¿Donde estaba Sana?

Un fuerte disparo, muy cerca mio me dejó en blanco, me quitó de mis pensamientos y no hice nada más que, por inercia, lanzarme al suelo cubriendo mis oídos y cabeza con mis brazos. Me dolía demasiado. Esa bala rozó mi oreja, no la llegó a dañar, pero me dolía, no escuchaba nada, un pitido muy potente se apoderó de todo mi campo auditivo.

Aún en cuclillas, giré mi torso para así ver a Dahyun en el suelo.

Lágrimas se apoderaron de mis ojos, de mi visión en general, lo poco que llegué a ver fue que estaba sangrando demasiado por su boca, no vi si estaba respirando. Lo último que recuerdo es ver a Sana, con una cinta negra y ancha en la boca, llorando a mares, probablemente tratando de gritar, intentando zafarse de los brazos de Matthew.

Caí aturdida al suelo debido al sonoro disparo que aun resonaba en mi interior, estaba en posición fetal cuando comencé a sentir fuertes golpes en mis costillas, patadas en mis brazos y un cuerpo que había sido lanzado sobre mi.

Seguía sin oír nada, solamente lloraba, no podía hablar, no sabría que decir, no veía nada puesto que las lagrimas tapaban todo mi campo visual.

Los golpes pararon y solo llegué a ver luces rojas y azules, no podía moverme por el cuerpo que tenía sobre mi, así que con cuidado traté de quitarlo de mí, sentí que aun respiraba, eso era bueno supongo.

Tantas luces y tantas personas a nuestro alrededor me agobiaban, no me dejaban ver lo que sucedía, saturaban mi visión, logré divisar una melena rubia, era Dahyun quien estaba sobre mí, pero...

¿Y Sana?

-

Mis ojos se fueron abriendo, muy lentamente. Un dolor intenso invadió mi cabeza, dolió unos segundos y luego oí un zumbido, al principio era muy fuerte y agobiante, pero fue disminuyendo al sentir un pinchazo en mi brazo. No escuchaba nada a mi alrededor, lo poco que veía en ese instante era borroso, alcancé a ver a mi derecha a una persona recostada en una cama, al igual que yo, por el cabello rubio deduzco que es Dahyun.

Cerré de nuevo los ojos, me sentía cansada, y me quedé dormida al instante.

-

Siento que me tocan el brazo, como si quisieran que despierte. Luego de eso, unas gotitas de agua que caen sobre el mismo. Abro los ojos de nuevo, había mucha luz, me molestaba, por lo cual arrugué mi nariz y siento que dos personas me abrazan. Eran Rosé y Nayeon, pero...

No las escucho.

Mis ojos se acostumbraron a la luz, veo que mueven la boca, sus labios amoldaban letras, palabras, oraciones, y ninguna llegaba a mis oídos.

Hablaban entre ellas, preocupadas, y a los segundos llega el ¿Doctor? ¿Estoy en un hospital? Espera. ¿Dahyun está aquí?

Moví rápidamente la cabeza, mala idea, un mareo se apoderó de mi, pero a los pocos segundos se fue y logre ver que, en la camilla de mi derecha, estaba ella y Jisoo a su lado. Tenía puntos en su barbilla, pero estaba despierta y sentada. Eso me hizo sonreír, ella estaba bien.

Volví mi mirada a mis hermanas, estaban paradas a mi lado, me sonreían, pero había tristeza en sus miradas. El médico me dice algo, pero no lo escuche, me quedé viéndolo esperando que me lo repita, y así lo hizo, pero no escuche. Me hizo una seña para que mire hacia donde mis hermanas y eso hice, recortando la cabeza contra la almohada y siento que el pasa un aparato por mi oído. Era frío.

Cuando siento que lo quita, me hace una seña para que mire hacia donde estaba Dahyun y eso hago, hace lo mismo con mi otro oído, mientras yo la miraba a ella, quien me regalaba una sonrisa, pero estaba preocupada, esa sonrisa no era de verdad, para nada.

Nuevamente miro al doctor, quien estaba explicando algo a Nayeon y a Rosé. Nayeon se había tapado la boca con sus manos, y sus ojos estaban al borde de desbordar litros de lágrimas, mientras que Rosé simplemente no reaccionaba, estaba seria, escuchando cada palabra que el doctor le formulaba.

Escuchando.

¿Por qué no oía nada? ¿Me habrán puesto una inyección que provocaba como efecto secundario el no oír nada? Aunque, cuando la bala paso cerca mio, tampoco escuchaba. Ni a Dahyun ni a...

-¡SANA!-

Por dios, juro que grité con todas mis fuerzas, y aún así no escuché ni mi propia voz. Me había levantado de golpe de la cama, estaba mareada, quise correr, irme de allí, buscar por todo el hospital a mi novia pero el doctor me lo impidió, mis hermanas me abrazaron con fuerza, ya había comenzado a llorar, juro que gritaba, juro que mi llanto se podía escuchar por todo el pabellón.

Pero nada.

No escuchaba mis gritos, mi llanto, las indicaciones del doctor, las voces de Nayeon, Rosé, Jisoo, Dahyun. Nada. Ni un sonido. Ni una palabra entraba a mi tímpano.

Volví a sentarme en la camilla, no dije nada mas ese día, solo miraba hacia abajo, con la mirada fija al suelo, sin despegarla de allí.

Sana se había ido.


















































1039 palabras.

perdón, muy corto, pero es lo que mi seco cerebro pudo redactar :')

/llorar/

nos leemos en el siguiente capítulo ❤

。˚ I Came Back To Remember ೄDonde viven las historias. Descúbrelo ahora