난 못해 | Jeon Jungkook

Only|뿐

-¿Nos vemos en la salida entonces? -preguntó un coqueto Jungkook, apoyado con su antebrazo sobre la cabeza de la pequeña muchacha.

-Sí, recuerda que debemos estar en mi casa antes de las diez -le recuerda tocando la punta de su nariz.

-No lo olvido, recuerda que no puedo fallarle a mi cuñado -ríe.

-Cuñado y al mismo tiempo, suegro -ríe.

-Sí, pero sigue siendo mi cuñado en gran parte -le besa la mejilla- Ahora ve a clase, no quiero que te regañen por mi culpa -la deja en libertad, después de todo, la tenía acorralada en la pared junto a las escaleras que llevaban a la segunda planta del instituto.

-Está bien -se separa de la pared para acercarse al pelinegro y besar sus labios- Nos vemos después -sonríe al finalizar el beso, regalando un pico antes de salir de ahí.

Jungkook suspira y rasca su nuca con una sonrisa, jamás había estado tan loco por una humana.

Llevaba años en el mundo humano, siendo un maldito fenómeno entre tanta gente, pasando desapercibido y sin que nadie alce sospechas.

Sus únicos amigos que le han estado apoyando en todo este tiempo han sido YoonGi, Lisa, Jennie y Jimin, quienes eran pareja. Mientras tanto él, estaba con una humana.

El quinteto de vampiros habían ingresado al instituto años atrás, hace como dos años aproximadamente, todo a petición de los padres de los cinco. YoonGi, siendo hermano de Lisa, tuvo que ir con ella por decisión propia; su padre solo quería que Lisa fuera más sociable con quiénes son sus compañeros del día a día, los humanos. Ella había accedido después de hablarlo mucho con Jennie, su pareja, decidiendo que si no hacían caso a lo que sus padres pedían, tendrían que separarse. Ninguna vivía en Seúl y ambas estarían lléndose en direcciones contrarias.

Mientras que Lisa aceptó, YoonGi renunció a la idea de permanecer en casa estudiando, siendo un antisocial y con una piel que le delataba con solo la mirada, sus padres habían decidido que era mejor así. Más YoonGi se rehusó a dejar que su pequeña y adorada hermana se fuera sola a la vida con los humanos, él también quería y además, debía proteger a su hermana.

El primer año todo anduvo genial, YoonGi encontró el amor de su no-vida en los primeros dos meses que estuvieron ahí, un hermoso vampiro de ojos de ángel y con doble actitud. No está de más decir que al quinto mes ya eran pareja y habían empezado con todo.

Hoy, a dos años de estar ahí, Jungkook logró encontrar su contraria en el instituto, una hermosa muchacha que llegó un día como todos, siendo plato de los ojos del quinteto que todos veían inalcanzable. Aquel aroma a sangre negativa y limpia embriagó a los cinco vampiros en solo dos segundos, inhalando todo el aroma para quedar tontamente pegados a ella.

Jungkook fue quien intentó en primera instancia en atacarla, más cuando se dio cuenta de la inocencia y la dulzura que la niña transmitía, no pudo hacer más que dejarla en paz. Pero había algo que le llevó a conquistarla.

Su hermana.

JiWoo le dijo que aquella hermosa muchacha era quien dominaba en su corazón, que era quien debía estar con él, que era su contrario.

Sinceramente, se rehusó a creer en todo, parecía demasiado "Crepúsculo" para su gusto, y simplemente hizo caso omiso.

Más cuando recuerdos de lo que fue si vida antes de ser el monstruo que es ahora empezaron a llegar, no tuvo más remedio que aceptar que su corazón estaba llendo directo a su contrario, su amor eterno. Su hilo rojo.

Llevan apenas ocho meses siendo novios y ya siente que está vivo, nuevamente.

Hoy habían quedado que Jungkook llevaría a SaYee a conocer a sus padres, sería un gran paso.