Hija de Zalgo Hoodie y tu

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Desperté de golpe sin poder reconocer en donde me encontraba. Solo se que me encontraba en una cama blanca con evelyn en frente, y con un médico al lado. Intenté levantarme, pero un montón de cables en mi cuerpo me lo impidieron. -¿en dónde carajos estoy?-grité. Mi voz se encontraba quebrada por culpa del nerviosismo y otros sentimientos que estaban en mí en ese momento. -en el hospital señorita. Me temo que ayer, no se encontraba estable, y tuvimos que traerla hasta aquí-habló un hombre de túnica blanca. Él registraba todo en su libreta cada pocos minutos, hasta que llegó otro médico. Era el cambio de turno. Los dos hombres se saludaron coordialmente, y solo uno quedó en la sala.

Mientras miraba el reloj, el hombre que recién había llegado se puso la túnica, leyó unos papeles, y luego de unos segundos, interrumpió el silencio

-¿disculpe señorita evelyn. Puede venir un segundo?-ella simplemente asintió y luego se dirigió hacía mí.

-volveré rápido. Solo será un momento ¿de acuerdo?-Asentí. ella depositó un beso en mi frente. Y luego de eso, vi como de pronto con cada paso que daba desaparecía de la sala.

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-señorita Evelyn. La traigo hasta aquí para hablar del diagnostico de la señorita (tn)-Evelyn asintió sin decir palabra alguna.-bien, con mis compañeros del otro turno ya hemos revisado la historia de tn y lo sucedido. Y pues, ya tenemos un diagnóstico.- Evelyn tragó saliva. Sus manos a la vez, sudaban sin control.

-bien señorita, lamento informarle que la señorita tn, tiene depresión, pero también esquizofrenia.-las lágrimas de la jóven empezaron involuntariamente. No podía soportar que alguien a quien quería mucho o una de sus alumnas que mas amaba, tuviera que soportar un infierno en su mente.-lo lamento mucho señorita Evelyn-el médico pasó su mano por el hombro de la jóven en señal de comprensión. Ella dió una sonrisa desanimada, y el médico luego se retiró.

Evelyn continuó llorando unos segundos más en silencio. Luego, se secó sus lágrimas y aplicó maquillaje para ocultarlo todo. Este es el momento en donde más fuerte tenía que ser. Después de quedarse unos minutos más en sus pensamientos, salió corriendo a la habitación de (tn)

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Me encontraba mirando el reloj fijamente. Seguía la aguja con la vista, miraba cada tanto las otras camillas, los cables, hasta que en un momento sentí unos brazos abrazandome.-¿Evelyn?-ella me dió un cálido beso. En ese momento noté que llevaba mucho maquillaje puesto. Y su cara, no era la misma.-¿Eve sucede algo?-pregunté abrazandola. Ella solo me abrazó más fuerte. -nada (tu apodo). Solo, hay que irnos a casa cuanto antes. ¿está bien?-asentí. Ella solo depositó un beso en mi frente, y luego me ayudó a levantarme de la cama llena de cables.

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Guardé mi ropa, y fuimos directo a la creepy house. Llegamos de noche. Subí a mi habitación sin hacer ruido, y saqué toda la ropa del armario. Saqué la gran valija de abajo de mi cama, fui doblando cada ropa, guardando cada póster, y la cerré. Por último, antes de salir, di una última mirada a esa habitación. Esa habitación que había habitado durante un tiempo. Esa habitación que tanto odiaba pero a su vez, amaba y me inundaba la nostalgía. Suspiré, y me decidí a cerrar la puerta con llave.

Bajé, tomé un papel de una libreta, una pluma a tinta que había allí, y escribí una pequeña carta.

Zalgo y proxys: lo siento mucho. Se que hicieron lo posible para que me sintiera cómoda, para que me sintiera una más de ustedes. Y aunque estoy muy agradecida de ello, y intenté adaptarme a esta vida. Realmente siento que esta vida no es lo mío, realmente siento que esta vida no es para mí. Por eso, si me intentan buscar, no podrán. Porque  Cuando salgan en mi búsqueda, ya no estaré en este lugar. -(tn)

-¿lista?-preguntó Evelyn.-Asentí. Me tomó de la mano, me ayudó a cargar parte de la valija, y salimos de ese lugar, sin mirar atrás, decididas a no volver, y esta vez, por el portal correspondiente...