hola...

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Wonwoo tenía 20 cuando lo conocí, el era muy tímido y solitario, o eso yo notaba.

El siempre estaba en la misma cafetería, a la misma hora, en el mismo sitio. Lo sabía porque yo siempre iba a esa cafetería, era de los que solía pedir para llevar, pero desde que lo vi ahí una tarde de los principios de noviembre, pedia para comer ahí.

En ese tiempo estaba en mis años de practicante en la unidad médica de citas, así que podía darme ese lujo.

No me decidí a sentarme con el y preguntarle su nombre, hasta diciembre, unas dos semanas antes de navidad, cuando me habían avisado qe me cambiarían a emergencias la siguiente semana y pues no sabría mis horarios con exactitud.

Me pare frente a él, viendo como trabajaba en su laptop, con su casaca negra, un beanie del mismo color y sus ojos rasgados mirando el computador.

Saludé, pero no me escucho por los audios que llevaba puesto, así que le toque el hombro y reacciono, me inspeccionó con la mirada y sonrió a medias. Le dije lo que había estado pensando desde esa mañana y hace días.

-Siempre te veo acá a la misma hora que yo, así que pensé "Mingyu, porque no vas y le dices que te parece interesante y le preguntas su nombre"- el sonrio algo extrañado-asi que... ¿cuál es tu nombre?.

-Wonwoo- le dijo algo extrañado- supongo que eres Mingyu-este asintió- umm...

-¿Me puedo sentar?-Wonwoo pensó un rato.

-Tengo unas cosas que trabajar, si no te importa, puedes sentarte, mientras yo trabajo- Mingyu asintió y se sentó.

Y así me la pase mis últimos días libres, viendo como el trabajaba, y preguntándole algo de vez en cuando, esperando que el responda.

-Wonwoo- dije tocando su mano quien seguía al mouse, este se bajó los audífonos y me dio su atención-gracias por dejarme acompañarte durante estos días, pero no creo poderlo hacer más, mi trabajo me va a saturar.

El sonrio de labios dando un suspiro, y miro sus manos cuales estaban encima de la laptop, que había cerrado.

-Gracias por tu compañía, Mingyu, hasta luego- todo la laptop en sus manos y salió del café, dejándome confuso.

Habían pasado días, estar en emergencias era una adrenalina que no sabía que necesitaba, pero me gustaba, a parte de que no me dejaba ni tiempo de pensar en el blanquiñoso, cosa que era mejor.

El día de navidad de ese año llegó y ni entusiasmo me dio, tendría que trabajar, y solo me daban dos descansos, uno largo y otro corto, así que preferí quedarme en el hospital.

Cuando iba a comenzar mi descanso me llamaron a recepción, ahí me dijeron que alguien me esperaba en la sala de esperas.

Cuando entre vi al blanquiñoso que había estado rondando en mi cabeza, sentado con la lapto en sus piernas, al darse cuenta de mi presencia la cerró y se levantó.

-Siempre te veía ahí a la misma hora, ya me había acostumbrado a tu mirada sobre mi y cuando estuviste más cerca me di cuenta que... emm nose como decir algo bonito, pero ponte que va algo bonito- vi sus orejas rojas, me di cuenta que no hacía eso comúnmente- luego me dijiste que te ibas y no sabia que hacer al respecto, así que me dije "Wonwoo, porque no lo buscas y le dices que trabajar se te hace difícil si el no está a tu lado y que quieres que este ahí"-suspiro- sono muy egoísta.

-Asi que quieres que este ahi- el asintió con la cabeza gacha- también me gustas Wonwoo.

Creo que en ese momento supimos que queríamos estar juntos siempre.

Primero fue difícil por mirs prácticas, pero el estaba ahí para mi y yo para el.

A los meses se lo enseñe a mi familia, y a los dos años de estar juntos, haber terminado mi carrera, ya vivir juntos, me decidí.

Le pedí matrimonio y el acepto.

Wonwoo había dejado de trabajar en su computadora y buscó algo simple en lo que trabajar, después de que pidiera su mano.

A los meses nos casamos en una boda simple pero elegante, con un pastel muy bonito y el vestido de blanco y yo de negro.

Después de eso decidimos que queríamos tener hijos, por eso gracias a un vientre de alquiler tuvimos a nuestro niño, Minwoo.

El era hermoso, buscamos a una chica que encajara con las características mías o de Wonwoo, y gracias a eso el bebé se parecía a ambos.

Pero luego, todo comenzó...

incognito × meanie ×Donde viven las historias. Descúbrelo ahora