Capitulo 27

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Qué lindo es cuando estás durmiendo profundamente, ningún contacto con el mundo, solo la almohada, la cama, las sabanas y tú, sin ningún tipo de preocupaciones hasta que... alguien viene y abre las cortinas haciendo que todo el sol dé en tu cara dejándote ciega.

"Vamos arriba tenemos clases, tienes media hora para alistarte"- tenía mucho sueño así que tapé mi cara con la almohada- "Oh no... dije que te levantes y lo vas a hacer ahora mismo"- sacó la almohada de mi cara y la revoleó por algún sector de mi habitación.

"¿Estás loco Dustin? ¿Cómo se te ocu..?"- cerré mi boca por la persona que me vino a despertar de manera salvaje- "¿Clifford? ¿Qué... qué haces aquí?"- traté de peinarme un poco ya que seguramente me veo espantosa y con el cabello revuelto.

"Hoy es lunes, empieza la apuesta, ahora te pido que me hagas las cosas fáciles y haz lo que te digo"

"Cinco minutos más"- supliqué y me tapé con las sabanas de nuevo pero el imbécil me las sacó- "¿Tú quieres que te odie de por vida por hacerme eso?"- no me prestó atención a lo que acababa de decir porque sus ojos estaban recorriendo todo mi cuerpo ya que mi llama era algo ligero de ropa- "¿Oíste lo que te acabo de decir?"- le arrojé mi almohada dándole en la cara.

"Eh...eh... s...sí..."- aclaró su garganta- "Si no sales ahora mismo de esa maldita cama, tendré que sacarte yo"- reí sarcástica, usé mis brazos como almohada y cerré mis ojos para poder dormir nuevamente- "Tú lo pediste"

"Pero que..."- Michael acaba de tomarme de la cintura y me cargó en su hombro- "¡Clifford bájame ahora! ¿Estás demente?"- se reía de mi desesperación, me bajó y me puso en la ducha.

"Tienes solo veinticinco minutos, tenías treinta y malgastaste cinco por dar vueltas y quiero que apenas termines bajes, ni un minutos más ni un minuto menos ¿Está claro Evans?"- no le contesté- "Dije que si está claro Evans"

"Si está claro, ahora vete"- lo empujé hacia la salida.

"Si necesitas ayuda avísame"- le mostré mi hermoso dedo con fastidio pero al ver que se fue no pude contener una pequeña sonrisa.

En diez minutos me duché, en cinco minutos me cambié, y en diez me maquillé y peiné, veinticinco minutos justo, tomé mis cosas y bajé.

"Me sorprendes Evans, las chicas se toman cuatro horas para arreglarse"

"No soy cualquier chica Clifford... pero tú me sorprendes ésto... ¿Es para mi?"- había preparado el desayuno.

"Sé que no eres como las demás y no es para ti, es para nosotros"- nosotros sonó tan lindo viniendo de él- "Ven siéntate"- hice lo que me ordenó, todavía un poco aturdida por lo que acaba de decir, sí, sé que es ridículo, pero me pareció... no sé cómo explicarlo.

"¿Tú...tú hiciste esto?"- asintió, había preparado todo lo que me encanta.

"¿Cómo sabes que no tomo café?"

"Un mago no revela sus trucos"- contestó con autosuficiencia.

"¿Dustin no está?"

"Él me abrió y se fue dijo que tenía algo que hacer"

"Qué raro, no me dijo nada"- se encogió de hombros.

"Tendrás que hacer lo que yo diga por una semana y empezamos mal, que no se vuelva a repetir, baja el nivel de rebeldía conmigo"- dijo serio pero solté una carcajada- "¿Dije algo gracioso?"

"No su majestad, no dijo nada gracioso, perdón por mi falta de respeto hacia usted"- contesté burlonamente, me gusta hacerlo enfadar.

"Y también guárdate el sarcasmo ¿Terminaste?"

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