La reina del Byakugan

Batallitas

La tercera prueba eran batallas uno contra uno, pero antes tendrían una pre-eliminar.

Hana luchó contra uno de los compañeros del equipo de Kabuto.

Nada más dar comienzo la pelea el pelele cayó en una trampa ilusoria, que ocultó a Hana. Esta corrió le golpeo en la mandíbula con un gancho y de una patada en el abdomen le lanzó contra la pared, y quedó inconsciente.

-¡Boom!- gritó levantando los brazos en señal de victoria, luego subió arriba y fue caminado como Michael Jackson hacía atrás hasta detenerse al lado de Hinata.

-Eso fue rápido...- dijo Hinata mirando como se llevaban al chico inconsciente.

-Ya lo se- lanzó su trenza hacía atrás como una diva y sonrió -Ahora, prepárate para tu batalla- puso sus manos en los hombros de la otra, obligando a que la mirase a los ojos -Porque somos chiquitas...-.

-Pero peleonas...- Hinata sonrió y asintió con la cabeza.

....................................................................................................................................................

Hana miraba la escena sorprendida.

Aquella batalla estaba cargada de rencor y dolor. No había sido mala, Hinata había dado lo mejor de ella misma para ganar, que tampoco era mucho, aunque tenía una fuerza de voluntad que Hana no había visto nunca.

Neji había dejado claro que es mejor que la rama principal y porque recibe el mote de genio del byakugan.

Pero su mejor amiga estaba de camino al hospital, Naruto juraba venganza sobre su sangre y Neji ignoraba todo. ¿Y Hana? Hana observaba en silencio, sin palabras.

Neji paso a su lado sin mirarla.

-¿Qué ha sido eso?- le preguntó, haciendo que el Hyuga se detuviese, ambos dándose la espalda.

-El poder del byakugan- contestó socarrón.

-Me refiero a por qué intentas matar a Hinata- dijo girándose seria, el hizo lo mismo con un suspiró.

-Eso no te incumbe- ella se giró y le encaró.

-Cuando tratas de matar a mi mejor amiga empieza a importarme- el sonrió burlón.

-Eres demasiado pequeña para entenderlo- le dio tres palmaditas en la cabeza. Se dio la vuelta para seguir su camino, hasta que Hana habló.

-Estas demente... ¿Eres un asesino?- preguntó sabiendo que eso le iba a doler.

-¡Ellos son los asesinos!- gritó encarándola de nuevo, estaban lo suficiente lejos para que nadie les escuchara -La rama principal...- escupió estas últimas palabras.

-¿Hinata tiene la culpa de que toda la rama principal desprecie a el resto del mundo? Solo es una rabieta- el apretó los puños -Una rabieta asesina-.

Neji, cansado de la conversación, activo el Byakugan para tratar de intimidarla, a lo que Hana apretó los puños molesta.

-Retíralo-.

-¡Eres un mal intento de asesino!¡Deberías saber que nadie se merece que le llamen basura mejor que nadie!- gritó Hana asumiendo que iba a morir en esos momentos.

-¡Ya vale Hana!- se movió para golpearla con el byakugan, y a centímetros de golpear sobre el pecho de la chica se detuvo, y desactivó todo -Hana... Yo... lo siento...- se miraron a los ojos, ella le miraba con una expresión triste -No quería hacerte nada... solo es que...-.

-¿Qué?- preguntó ella triste -Yo puedo ayudarte con lo de la rama principal, si me dejaras...-.

-Todo lo que esta pasando no te incumbe, es mí problema, y no quiero que te metas- él se dio la vuelta -No te acerques a mí- advirtió marchándose.