"Lado Oscuro"

Capítulo Díez:

Todos se preguntaban que, ¿Cómo Jack Nappier había escapado de una cárcel de máxima seguridad?...

Bueno, ahora lo saben. Pueden reconocer que minuciosamente había podido hacer escapar a este renombrado criminal.

Planeando cada detalle de la operación "Rescate", que había salido con gran éxito. Y que absolutamente nadie sabía que estaba involucrada.

Nadie sabía que juntos teníamos grandes planes, para cada uno de ellos.

Él sabía mi propósito, y con ver solo el sabor de la venganza, hizo convencerlo para que nos uniéramos.

Ahora Nappier estaba libre, la policía no lo encontraba aún, y estaba segura de que no lo harían jamás.

Nosotros tampoco sabíamos en dónde se encontraba escondido.

Pero lo encontraríamos primero sí o sí.

-¿Saben en dónde puede estar? -dictamine.

-Si, señora -respondió uno de ellos.

-Recuerden esto siempre: NADIE puede saber, que estamos con él... -y fue lo último que dije.

Los hombres asintieron.

Y el mismo sujeto que me había respondido anteriormente, me señalo el lugar, y me dijo por dónde:

-Debemos entrar por ese sitio… –hizo una seña a una alcantarilla. Se pauso, y rascándose la barbilla hizo un gesto de cómo “Es algo raro, pero si”. –Creemos que puede estar allí escondido.

-¿Cómo saben eso? ¿De dónde sacaron esa información?, Saben que tenemos que estar un paso adelante de toda la policía.
No podemos fallar en esto, ni en nada –ordene.

-Recibimos un mensaje encubierto del Señor Nappier por celular –me miro y volvió a hablar -Estamos seguros que venía de él.

-¿Quién tiene ese mensaje? Necesito verlo, y estar segura. –insistí.

Derek, el hombre que había respondido todas mis preguntas desde un principio, saco su celular, y me lo paso para que viera el mensaje:

Habíamos implementado un método de mensajes encubiertos, para comunicarnos, y que solo lo sabíamos entre nosotros, para no correr el riesgo de ser descubiertos. Era complejo de entender. Se basaba en el idioma Griego.

Mensaje encubierto:

Traducción:

Devolviéndole el celular a Derek, di por terminado el tema, ya que ahora estaba segura de que si era él.
No lo volví a dudar, y emprendimos la búsqueda.

Saque nuevamente mi arma, sosteniéndola con mis manos por seguridad, y detrás de mí se ubicaron los tres hombres también armados; proseguí a guiarlos.

Entramos en una especie de túnel, en realidad era la primera alcantarilla que se situaba detrás del departamento, como nos había indicado Jack.

Estaba oscura, sucia, y había agua en el suelo.

Di una señal con la mano, para que avancemos.

Era extraño, porque no necesitábamos las linternas que habíamos llevado, ya que el túnel estaba iluminado al final por una luz...

Una luz que nos guiaría al "Lado Oscuro" del camino, y de todo lo que vendría después...

Caminamos lentamente por ese largo túnel, cuando más nos acercábamos, la luz que había en el final, se hacía más brillante. Eso significaba que estábamos por llegar al lugar indicado.

De repente escuche un ruido. Me detuve en seco, haciendo que los tres hombres que venían detrás de mí, también lo hagan.

Levanté la mano, en señal que se detengan.

-¡Silencio! -ordene -Escuche algo. -Dude por unos segundos, pero al comprobar que no era nada, proseguimos el camino.

Casi en el final del túnel, la luz quemaba mis ojos.

Y una leve risa que se escuchó de la nada, hizo que mi corazón parará de latir por unos instantes, y que la piel se me erizara.

-Jack, ¿Eres tú? -pregunte con cautela.

-¡Al finnn! -estiro la última palabra. -Me has encontrado, cariño -respondió el extraño dando aplausos.

-¡Saca esa maldita luz de mi cara! -ordene molesta.

-Está bien, no te molestes cariño -dijo sarcástico.

-Ya te eh dicho que me molesta que me digas así Nappier –le respondí irritada.

-Lo siento -dijo sonriendo.

Hice un gesto de que ya no importaba.

-¿Te encuentras bien? –pregunte.

-Si, no te preocupes. Sabía que me ibas a encontrar tarde o temprano. Y por el mensaje encubierto también. –dijo satisfecho.

-Muy bien. –respondí, aun con mi arma en las manos.

El Jack sonriente pasó a un Jack serio, que me miraba intensamente.

-Hazlo –dictaminó sin mover un músculo de su rostro.

-Pero Jack, pueden servirnos... -me calló levantando su mano en objeción.

-Hazlo Emma, tú sabes el porqué. –me ordeno.

Tres disparos, uno detrás del otro. Sin darle la oportunidad de darse cuenta. Sin titubear, sin medir consecuencias.
Los hombres que habían venido conmigo, ahora estaban muertos. Los había asesinado sin más.

-Que sea la última vez que me ordenas así. -le dije mirándolo fijamente. -Somos socios, no soy tú subordinada.

Jack Nappier no dijo nada, sólo volvió a sonreír.

Enfundando mi arma nuevamente en su lugar, me ubiqué a su lado.

-¿Dónde puedes esconderte? –le pregunte a Jack.

-Ya tengo un sitio seguro. Acompáñame, y sabrás donde es.

-Está bien, vamos.

Empezamos a caminar.

Nuestra salida fue por una desviación del mismo túnel.

Emprendiendo hacia la salida, nos perdimos en la oscuridad de la inmensa alcantarilla.

Nos perdimos en el
Lado Oscuro...

~Fin~