Capítulo 225: Malentendido el deseo de Nie Sangyu

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Ji Man lo miró con una mirada extremadamente frustrada durante mucho tiempo. Después de que ella finalmente calmó su respiración, tomó su pincel y escribió las palabras "Te amo" en el fino papel de escribir.

"¿Cómo lees esto?"

Ning Yuxuan levantó las cejas. Esta mujer estaba extrañamente centrada en estas palabras. Él frunció los labios y preguntó: "¿Qué estás tramando?"

"Este sirviente solo quiere escuchar a mi señor decirme estas palabras", dijo Ji Man.

Marqués Moyu guardó silencio durante un rato, luego se llevó el fino papel de escribir. Sonando muy bien, dijo: "Hablemos de esto esta noche. Estoy ocupado con algo ahora".

Ji Man, "..."

Se había calmado un poco de su estado excitado anterior. Se dio la vuelta y salió del estudio. Mirando el claro cielo azul oscuro, Ji Man abrió la boca y suspiró.

Este sueño había durado demasiado. ¿No era hora de que terminara?

Después de que Ji Man regresó al patio de Feiwan, Dengxin tenía muchas cosas que informarle, pero Ji Man no le prestó atención. De todos modos, mientras Ning Yuxuan le dijera esas tres palabras esta noche, ella podría regresar. ¿Cuál era el punto de seguir preocupándose por estos asuntos?

Sentada en la cama, pensó en todas las cosas que habían sucedido. Pensó en las personas que ya no estaban aquí, la vieja señora, Gancao y Qian Lianxue ... Todavía tenía tantas conexiones con este mundo. Desafortunadamente, su visión de la vida y los principios no coincidían con este mundo. Era imposible para ella encontrar un hombre aquí y decidió pasar el resto de su vida con él. Alojarse aquí era lo mismo que aceptar competir por el favor hasta el día de su muerte.

Y así, cuando Ning Yuxuan vino esa noche, Ji Man todavía estaba de buen humor. Ella lo detuvo para sentarse en la cama y lo miró con una mirada esperanzada.

El marqués Moyu no era un idiota. La actual Nie Sangyu no era una persona que disfrutara escuchar palabras de amor melosas. ¿Por qué estaría tan ansiosa por escuchar esas simples palabras?

"El emperador me otorgó vino de pera hoy". Ning Yuxuan señaló el recipiente de vino que había sido colocado sobre la mesa. "Fue fermentado en primavera. Hoy es un buen día para beberlo. Sabe bastante bien".

¿Qué? ¿Necesitaban beber vino para animar las cosas?

Ji Man miró dudoso el vino. "Este sirviente no tiene una alta tolerancia al alcohol ..."

La última vez que tuvo que beber vino, lo escupió en la manga.

Ning Yuxuan se echó a reír, se acercó a la mesa y sirvió personalmente dos tazas. "¿Todavía recuerdas que en nuestra noche de bodas, no pudimos beber nuestro vino marital?"

Usted no dice! Por supuesto que lo recordaba. En ese momento, Nie Sangyu había querido desesperadamente que bebiera ese vino, y Ning Yuxuan no había podido resistirse. Pero, al final, tal vez porque estaba demasiado entusiasmada con inclinar la copa hacia adelante mientras bebía, solo tomó un sorbo antes de ahogarse y escupir el vino. La mujer de la buena suerte no podía dejar de reír, por lo que Ning Yuxuan se ocupó del resto del vino vertiéndolo en la manga.

Cuando Ji Man había estado observando ese recuerdo, finalmente entendió por qué la gente en la antigüedad tenía mangas tan grandes.

Ji Man preguntó: "Mi señor, ¿vas a compensar ese tiempo bebiendo vino ahora?"

Ning Yuxuan le trajo el vino. El fuerte olor era un poco picante, pero una vez que se acostumbró al olor, también pudo oler una fragancia dulce y ligera.

EL SOÑADOR EN EL SPRING BOUDOIR (2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora