Las dos caras de Jimin

III

“Siempre trate de mostrarme como una mujer segura, sería.
Aun que en el fondo soy una persona tierna y dulce.”

—Q~que vas a hacer j...—no termine de hablar, ya que Jimin comenzó a besarme, beso que en ningún momento correspondi, y al darse que no lo correspondi, comenzó a meter su lengua en mi y volvió a besarme de una manera agresiva, y cuando el aire se nos acababa, dejo de hacerlo, de mis ojos caían lágrimas, y cubrí mi boca.

—No sabes nada de mi— susurró y se levantó para salir de mi habitación.

Cuando se fue, no pude evitar llorar, mi hermanastro me había robado el beso que tanto deseaba hacer con el hombre de mis sueños.

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—Le traje su uniforme señorita Tn, ya está lavado y planchado, esta en su armario.— me dijo una de las sirvientas.

—Muchas gracias, dime sabes una ruta rápida para llegar a la escuela— dije mientras tomaba una taza de té.

—Señorita TN, ¿No irá en la camioneta con el joven Jimin— dijo un poco extrañada.

—No le digas nada, porfavor, me gustaría ir por mi cuenta— le suplique.

—Siendo así...hay una ruta que puede tomar—me dijo.

Después de que me explicara subí a mi habitación y acomode mis cosas en mi mochila y me preparaba para dormir.
Pedí que trajieran agua y la dejarán en un pequeño estudio que tenía en mi habitación.
No quería volver a ver a Jimin haciendo quién sabe que cosas con las sirvientas.
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Son las 7 de la mañana.
La entrada a la universidad era a las 9 de la mañana.
Baje al comedor y una de las sirvientas me sirvió el desayuno y cuando termine me dediqué a arreglarme para irme.
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Estaba felizmente caminando ala escuela cuando una camioneta se paró enfrente mío, me sentía confundida.
Y me asusté cuando una persona bajo de la camioneta y al ver su cara vi que era Jimin.
Quería correr pero me agarró del brazo.

—A donde crees que vas— dijo molestó.

—Sueltame, me estás lastimando— comencé a sollozar por qué me estaba lastimando.

—Acaso crees que puedes irte sin mi, si alguien se entera que eres una Park y que sales caminando ala calle como si nada, yo tendré que cargar con la responsabilidad— grito.

—Entonces no te preocupes, usaré mi antiguo apellido y ya no tendrás problemas— me safe de su agarre y el se acercó a mí para cargarme como un saco de papás.

—Vamonos ala escuela— caminaba hacia la camioneta.

—Bajame ahora Park Jimin, te juro que cuando me bajes te pateare ese enorme trasero que cargas— grite y jimin me metió ala camioneta y luego entro el para cerrar la puerta y la camioneta comenzará a andar.

—Asi que ahora me vez el trasero— comenzó a reír.

—No Jimin no te sientas importante, solo lo dije por decir— hice un puchero y él me miró con una sonrisa.

—Sabes no tienes que finjir conmigo, se que aquella vez viste mi trasero y te encantó—  soltó.

—Eso es mentira—grite.

—shhhh, el chófer se molestará contigo por lo molesta que podrías llegar a ser— bufo y guarde silencio.

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Después de salir de la escuela el chófer vino por nosotros, a decir verdad me gustaría decir que todo el día me la pasé en un salón, haciendo amigos, estudiando pero no fue asi, me la pasé encerrada en la oficina de profesores ya que me aplicaron un examen de conocimientos.
Mi cerebro está agotado y ya no puedo mas.
Al llegar a casa bajamos de la camioneta y mi mamá nos recibió en la puerta de la casa.

—Que bien que ya llegaron, necesito que vayan a cambiarse, saldremos de compras.

—¿Compras?—dijimos Jimin y yo al mismo tiempo.

—Vaya, apenas se conocen y ya se sincronizaron, me sorprenden.

—Seño... Mamá, si necesita algo la servidumbre se puede encargar, no es necesario que tengamos que salir— dijo Jimin.

—Pero de que hablas Jimin, debemos salir y caminar, pasear y esta es una gran oportunidad.

—Mama, al parecer Jimin jamás a tenido una salida familiar— me cruce de brazos mientras miraba de reojo.

Mi mamá y yo intercambiamos miradas y después de cambiarnos el uniforme nos subimos ala camioneta y nos fuimos al parque los tres juntos.

A mi mamá se le ocurrió la brillante idea de que comiéramos helados, y fuimos a comprarlos y nos sentamos en una mesa a degustar de nuestro helado.

—Mama y ¿dónde está papá?¿Por qué no vino con nosotros?— dije antes de morder el cono de mi helado.

—Ohhh... El...

—Se fue de viaje— dijo Jimin con una frialdad que hacía que me estremeciera —Desde que mi mamá nos abandono mi papá ... Se la vive recorriendo el mundo.— mordió su como de helado.

—Tu papá me lo contó, pero dime, estuviste al cuidado de tu abuelo, ¿No es así?— dijo mi mamá llena de curiosidad.

—Asi es, pero la mayoría del tiempo me quedé viviendo solo en esa gran mansión, solo....— dijo con un nudo en la garganta —Mi abuelo fue muy bondadoso conmigo al cuidarme.

Vaya, realmente subestime a Jimin a lo grande, pensé que era un chico caprichoso, niño de papi pero realmente ah vivido solo por mucho tiempo.

—Ya nos vamos TN— dijo mi mamá mientras se alejaba de la mesa junto a Jimin.

Rayos, me quedé pensando que me desconecte del mundo exterior.

—¡Esperenme!— grite mientras intentaba alcanzarlos.

Corri hasta poder alcanzar los y cuando lo hice camine alado de Jimin, lo veía de reojo y la palabra “No saber nada de mi” resonaba a cada minuto.
Me preguntaba que es lo que guarda el obscuro corazón de Jimin.

—TN, ten cuidado por dónde caminas, te vas a caer.

Y si Jimin lo único que necesita es amor?

—¡TN, te vas a caer en la fuente!— dijo mi mamá un poco alto.

Mire a mi mamá confundida dejando de ver lo que había enfrente mío.

—¡Cuidado TN!

Mire enfrente mío y estaba enfrente de la fuente,  y seguía caminando, puse mal y sentí como iba a caer, intenté tomar cualquier cosa, tome el brazo de Jimin, pero en vez de ayudarme a no caer, ambos nos caímos en la fuente, la rodilla de Jimin se encontraba cerca de mi zona intima, su cuerpo estaba encima de mi.

—Quitate de encima de mi Jimin—Grite.