9•Reencuentro.

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CAPÍTULO 9

Reencuentro.

Draco estaba en la ducha, el agua caía por su pálido cuerpo desnudo, penetrando en sus poros. Cerró los ojos y recordó a su amado, la primera vez que se vieron, se remontó al momento. El parque desierto, a excepción de ellos dos, sus ojos verdes tan bellos e inigualables. Abrio los ojos volviendo al presente. Cerró la regadera y fue a su habitación. Después de prepararse para dormir, rodó sobre la cama. Su mente lo trajo de vuelta. Lo vió sentado en el suelo, el joven de gafas redondas de 14 años, lo observaba con su mirada habitual.

Draco se sentó inmediatamente. —No puedo más. —Soltó frustrado. —Tengo 15 años buscándote y no te he encontrado. —Las lágrimas brotaron.—Y sí no te encuentro dentro de poco te dejaré ir.

El pequeño Harry frunció el ceño, parecía disgustado. El Rubio presenció como se desvaneció, sin dejar una evidencia de su presencia pues no era real. Draco trató de traerlo de vuelta pero le fue imposible. Resignado se puso de pie, buscó en su cajón el collar en forma de rayo, (el cual era pareja de el suyo). Los contempló eran idénticos. Eran collares de pareja, y cada uno tenía que tener el suyo.

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Cuando amaneció el azabache, ya estaba en casa con su novia. La pelirroja estaba molesta, por la repentina aparición de Víctor. Este lo había notado, así que después de instalarse en su habitación fue al comedor, donde ella preparaba el desayuno.

—Estas molesta. —Le encaró directamente.

—Te adoro y tu lo sabes, pero detesto que hagas estas cosas. —respondió mientras picaba los vegetales.

El castaño le dió un beso en los labios sorprendiendola, ella aceptó el beso encantada, ya que él nunca iniciaba ningún beso. Cuándo se retiró, ella se quedó con ganas de más, él lo notó.

—Perdoname. —Dijo mientras la abrazaba.

Fler lo miró, sus ojos en ese día eran azules. —Me estás chantajeando, pero me gustó el beso, así que no molestaré más.

El ojo azul sonrió divertido. —Eres la primera novia, a la que le desagrada que su novio quiera estar con ella.

—Eso es porque confío en tí. —dijo mientras se pegaba a su pecho.

—Yo no lo haría. Sabes si me hubiera quedado, bien pude haber conocido a alguien más y no sé..

Fler le dió una mirada de advertencia y Víctor se calló. —No lo permitiría jamás. Eres mi príncipe. —Su presencia le parecía reconfortante, pero sabía y tenía miedo de que algo sucediera, algo que lo dañara o apartara. —Solo que... Nuestro país, sé lo que representa para tí.

El rostro de Víctor se puso serio, veía la preocupación en su prometida. —Descuida mi niña. Yo soy muy fuerte y tonto, he olvidado todo lo malo. Mi mente es fácil de formatear. Ya no recuerdo nada de lo malo. —Pasó su mano sobre la frente de Fler y susurro.—"Obliviate" —Le sonrió. —Estas son las palabras mágicas.

Fler lo miro con adoración y asintió con la cabeza. —Pero por favor prométeme que no volverás a sorprenderme así.

—Lo prometo.

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Draco revisaba las cámaras de seguridad que le habían proporcionado. El caso de Maxim de la Cur, era uno que tenía que esclarecer. En las cámaras encontró a una persona que conocía Karkaroff. Ese hombre era empleado de su padre. Checo la fecha de la Cámara de seguridad, su visita había sido un día antes de la muerte de la mujer (Maxim de la Cur), Karkaroff ni siquiera había entrado solo había observado desde afuera. El rubio lo señaló como sospechoso y fue en su búsqueda, ya sabiendas que estaría en la empresa de su padre.

Lo Siento (Drarry) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora