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—Ahhhhhhhhh, estoy muy nervioso.— se quejó Mike. Hoy conocía su esposa virtual y los nervios lo consumían.
Se sentó en un banquito de aquel café cerca de la famosa empresa "Big Hit Entertainment", donde le indicaron que fuera. Pero el estaba sumergido en sus pensamientos, apesar de que las cámaras lo seguían en cada movimiento que hacía. Él quería llorar, antes de ser un idol el solía ser del tipo de hombres que gritan "me gustan los hombres, y no me avergüenzo de ello", pero ahora que tenía fama, parecía imposible.
Y no era del tipo de negar que le gustaba su mismo sexo, puesto que el no le ponía mucha atención a la sexualidad de nadie y no importaba si a alguien le gustaran hombres o mujeres, para él sólo era... amor.
Pero de nuevo recordemos que él ya no era cualquier persona, era un idol en una cultura en la que aún este tipo de temas seguían siendo tabúes.
—¿Crees que le guste?— preguntó con un tono preocupado. El camarógrafo le enseñó un pulgar arriba y su respiración se tranquilizó un poquito.
💚
—Soy el golden maknae, soy el golden maknae...— murmuraba para si mismo.
Dios, su corazón se iba a salir de su pecho. Por su cabeza pasaron mil maneras en las que se podía avergonzar a sí mismo y no podía permitirse eso ¡Era el maknae de oro, por las barbas de Merlín!
—¿Dónde era?—revisó por milésima vez la dirección apuntada en la aplicación de Google Maps, estaba relativamente cerca para ser sinceros pero el sentía su cuerpo tembloroso y pesado como si hubiera corrido millones de kilómetros, sus palmas sudaban bajo su agarre en el oso de peluche. Se sentía como un niñito en su primer día de primaria, hasta creyó que se haría pis ahí mismo.
—¿Y cómo se supone qué sepa quién es?— preguntó nervioso pues estaba a unos pasos de la entrada.
El camarógrafo le respondió con un "pan con jalea" y Jeongguk no pudo quedar más confundido. ¿Qué chingados significa eso?
Entró siendo forzado por el señor y deseó no haberse levantado esa mañana. Su mano pasó por su cabello olor a shampoo de chocolate.
—¿"Pan con jalea"?— escuchó una voz grave detrás suyo seguido de un quejido— ¿Cómo se supone que la encuentre?
—¿"Pan con jalea..."?— leyó con confusión Jeongguk—¿Quieren que grite esto como si nada?— estaba preocupado, mas que eso, estaba muriendo.
El staff solamente asintió y palideció. ¿Cómo? ¡Él no iba a gritar semejante estupidez frente a las diez personitas que se encontraban en ese café.
—Okay okay okay, golden maknae. Tú eres el orgullo de tu generación, el bebé entre los ancianos de tu grupo. No importa quién sea, te casarás y esta temporada será un éxito— se dijo por última vez pero todos sabemos que tenía una sola persona en la cabeza. Él no negaba que tal vez, sólo tal vez tenga un pequeñito enamoramiento hacia el dichoso Mike Wasaoski
Llenó sus pulmones de aire, aclaró su garganta y dijo un: "¡Pan con jalea!" lo suficientemente algo para captar la atención de un rubio que se sentaba detrás de él.
—Disculpa dijiste ¿pan con jalea?— su voz era motona pero sus ojos sólo indicaban sorpresa.
—Tú eres... ¿mi esposa?
💚
—¿Así que saldremos?— ambos estaban sentados en el café mirando hacia las cámaras con los rostros más confundidos del mundo.
—Ustedes saldrán por los siguientes tres meses y se casarán.
—Pero... ¿somos dos hombres?— preguntó el pelinegro
Después de una buena plática, todas sus dudas fueron respondidas. Sólo quedaba dar por empezado su relación.
—Hehe. Soy MinKi, llámame Mike o como quieras— habló con esa sonrisa encantadora, que enamoraba a todos.
—Jeongguk, ¡espero llevarnos bien hyung!— ¿se notó su nerviosismo?
—No creo que el "hyung" sea necesario, soy tan sólo unos meses mayor
De pronto recordó porque había una cajita en su bolsillo, y el rubor de sus mejillas se recorrió hacia su cuello
—Jeon Jeongguk— comenzó, sorprendiendo al otro chico— ahora que todo está en claro— se arrodilló frente a él—
¿Te casarías conmigo?
______________ Love myself; Love yourself —D.E.A ♡
