—Llevo años sin haber sido feliz, no puedo olvidar todo el rencor que tengo guardado en mi ser por culpa de aquel demonio de mierda que solo llegó a arruinarme la vida.
—¿cuando terminaron? —preguntó el psicólogo.
—Ya están por cumplirse dos años desde que terminamos, ¿por que preguntas?
—Y desde ese tiempo, ¿no volviste a enamorarte? A que crees que se debe?
—Es obvio que la ruptura me daño tanto que aun no soy capaz de abrirme nuevamente a alguien.
—No eres capaz o no quieres dejar esa etapa atrás?
—Hay alguna diferencia? por que yo no la veo.
—Quizá simplemente aun no la notaste, pero sigamos, ¿no me habías dicho que tenias a alguien?
—Te hablé muy poco de ella, es del sur por lo que no la conozco realmente y no creo nunca poder conocerla.
—Y acaso la distancia es un problema?
—Claramente, no puedo salir con ella, no sabré lo que hace
—Realmente estas buscando alguien con quien sentar cabeza o simplemente buscas una esclava que solo te quiera a ti
—Un poco de ambas, tu me conoces, sabes que me encantan las antisociales
—Sinceramente, no creo que realmente te gusten las mujeres antisociales, creo que solo te gusta la seguridad que ellas te dan al no tener conexiones sociales, estas evitando otra infidelidad hacia ti eligiendo mujeres infelices y aprovechándote de ellas
—Eso no es verdad, quiero darle una vida social activa, sacarla con amigos, pero a fin de cuenta siempre volverá conmigo
—Por que te gusta controlar constantemente sus relaciones sociales, eres muy inseguro
—Puede ser verdad, pero le hago un bien, si realmente me quiere entonces no necesita a nadie mas que a mi
—Pero eso la llevará a la infelicidad
—Eso no va a suceder, ella me ama
—...O eso es lo que quieres creer
—Siento que ya fue suficiente por hoy, ¿no crees?
—Apenas llevamos 15 minutos
—Es suficiente por hoy, me tengo que ir
Regresé a casa algo enojado por lo que dijo el psicólogo, en cierta forma tenia razón pero no tiene la verdad absoluta de los hechos. No logro quitarme ese mal sabor de boca que me dejó la sesión así que me pongo a jugar algún videojuego para distraerme y olvidar el asunto, eventualmente anochece y decido dormirme bastante tarde, tratando de no hacerlo mas, por alguna razón cerrar los ojos y tratar de tener un sueño agradable siempre hace que me salgan lagrimas hasta que me termino durmiendo.
Desperté a las 14:00 pero permanezco acostado hasta que el hambre me obliga a levantarme, por ahí de las 18:00. Me levanto y me hago un café el cual acompaño con galletas, no es mucho pero aplacará el hambre hasta la noche, cuando llegue el momento pensaré en que cocinar. Mientras me encuentro absorto en mi desayuno, admirando el mueble frente mio, recibo un mensaje de mi novia que vive en el sur, lo que me hace sentir aliviado de cierta manera, como si alguien anestesiara mi alma haciendo que desaparezca el dolor que siento constantemente en lo profundo de mi ser. Ella es amable pero sin duda lo mejor es que no tiene muchos amigos, esas si son las verdaderas mujeres, pero claro, no soy un enfermo, obviamente me gustan varios aspectos de ella, es divertida, no se rinde y su voluntad es fuerte, somos totalmente opuestos, en un mundo normal claramente no funcionaríamos pero este no es un mundo normal, no existen demonios arranca almas en un mundo normal.
—¿Que tal estas, ya estas mejor de tu enfermedad?
—Claro, ya me siento mejor, mi vida
—Me alegro amor, tengo que irme a la universidad, te llamaré cuando regrese, esta bien?
—Por supuesto, hablamos luego, te quiero
No estuve enfermo ayer, un amigo me trajo los clonazepanes que le pedí, una caja entera.... eso sera suficiente como para todo un mes. Cada vez que trago una pastilla me invade la culpa, siento como un tumor creciendo en mi alma que se come toda mi felicidad, mi novia se preocupa mucho por mi, le importo genuina mente, al contrario que cierta zorra que conocí anteriormente. Me destruye caer presa de estos vicios cuando me la paso mintiéndole acerca de mis malestares, me destruye tener que mentirle a diario, si hay algo que me impide suicidarme es pensar que ella estaría destrozada si lo hiciera, no quiero ni imaginarme su cara de sufrimiento al ver en las noticias una nota sobre mi suicidio así que no lo hago... aunque debo admitir que si la perdiera, mi ya extremadamente sensible psique quedaría totalmente destrozada, literalmente no soy capaz de pensar en una solución distinta a quitarme la vida, no soy físicamente capaz de dilucidar una salida de esa situación.
Para cuando me di cuenta ya son las 21:00 y lo único que hice fue ver el mueble frente mio durante varias horas, estoy agotado... no quiero ni comer. Decido ir a dormirme sin haber cenado, con hoy ya van cinco días sin comer una comida real. Me recuesto y admiro la penumbra de mi habitación, sintiéndome solo como de costumbre, termino llorando desconsoladamente hasta dormirme por el cansancio.
Me levanto sintiéndome de la mierda, muy enfermo, realmente. Mi malestar me sigue durante mi día hasta la sesión semanal con el Psicólogo y entre sus balbuceos logro aislar un par de palabras..." Trastorno de Depresión Mayor"..."Trastorno antisocial de la Personalidad"..."... Esta hablando estupideces, no tiene idea de lo que habla, como se recibió este imbécil...
—Entiendes lo que te estoy diciendo?
—Si, claro —no pude evitar decirlo sin balbucear, se dará cuenta que estoy drogado.
—No creas que no me di cuenta que no venias en buen estado a las sesiones, me temo que voy a tener que decirte que consideres internarte, no estas en buen estado.
—¿Que sabes tu? no sabes nada, estoy totalmente bien.
Decidí irme, obviamente estaba diciendo estupideces así que debía irme. Regresé a casa a rastras, estaba horriblemente cansado, despierto acostado en la puerta, los vecinos me ven así que me levanto y entro a mi casa, me termino desmayando nuevamente en el sillón hasta despertar durante la madrugada, hambriento decido cocinar unas salchichas y un arroz, rompiendo mi racha de casi una semana sin alimentarme. Termino saliendo al parque cercano a mi casa, caminando en la oscura noche que me cortaba con sus gélidos vientos me termine agotando así que me siento en una banca, y termine viendo el estanque como por una hora, hasta que me distrae alguien. No me hizo nada, pasó frente a mi y me interrumpió mi vista del estaque, lo observo odioso cuando lo vi tirando su celular accidentalmente, se detuvo, lo levantó y siguió su camino adentrándose en la penumbra del parque, tratando de seguirlo, noté por pura casualidad, una pequeña tarjeta de memoria la cual decidí tomar para mi.
Llegue a mi casa cansado de tanta caminata y decido probar la tarjeta de memoria..."16gb, no está mal" pensé que seria segura, al instalarla tenia dentro suyo un único archivo... "Time Manager 2", pensando que era algún juego entretenido y lo ejecuté, al abrirlo su interfaz era confusa, era como una aplicación de alarma, un reloj en el medio y una barra arriba que decía fecha, en el medio un monitor y debajo de este dos botones "reproducir" y "viajar".
Descubriendo como funciona la misteriosa aplicación, decido hacer una prueba poniendo la única fecha que recuerdo, ese horrible día en el que conocí al que seria el diablo encarnado, el origen de todos los males, la raíz de las desgracias, la que seria mi ex-novia. Introduje la fecha y presione reproducir, en el monitor se desplegó un pequeño vídeo en primera persona de alguien caminando hacia la casa de mi ex-novia, noté algo extraño, ese tipo del vídeo era muy similar a mi pero lo que me perturba fue ver un recuerdo del baño, cuando el tipo de vídeo se vio al espejo... era yo.
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Ojala nunca te hubiera conocido
General FictionNuestro protagonista es Joaquin, su novia lo engañó y abandonó ya hace 5 años pero el aun sigue dañado, un dia descubre un aparato que podria ayudarlo. ¿Que hara Joaquin?