Carta de Suicidio

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He muerto, vaya novedad. Seguramente ya lo sepan o esta carta perdería sentido.

Siempre que pensé en mi muerte, en mi mente revoloteaban los pensamientos de que sucedería después, pues estoy consciente de que mi vida no es una película, donde al morir la trama finaliza, el mundo gira al rededor del Sol y no de mi.

Y LAS MANECILLAS AVANZAN.

Mi curiosidad no cesa al pensar a quien le afectaría mi muerte, es egoísta por mi parte querer esto pero no lo puedo evitar. Pensar si realmente me lloraran, si me recordarán, si realmente fui importante para alguien.

Muchos dirán que viví muy poco pero para mí fue toda una vida, gran parte del tiempo reí, en su mayoría lloré, pero no culpo a nadie, esa es mi naturaleza.

Ahora que estoy muerta ya no hay estrés, tristeza o ansiedad, ya no hay razones. Recuerdo mi vida y agradezco a todos su tiempo y buenos momentos antes de lo material; trato de no ser rencorosa pero si hay algo después de esto, regresaré cómo un fantasma a atormentarlos por las noches.

BESOS.

X O X O

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