Capítulo 2: Nanachix

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Desperté en el santuario del centro de la Isla. Era un lugar inmenso y, junto con cientos de personas más, nos encontrábamos al centro. Pude leer en varias paredes la palabra "Nanay" escrita con sangre, lo que advertía nuestro doloroso final.

Me levanté del suelo con ayuda de otros esclavos. Muchos teníamos expresión de resignación, mientras que otros estaban completamente aterrados.

Todo era desconcertante, de pronto, de la parte más elevada del lugar, aparecieron llamas púrpuras en cada una de las cuatro antorchas que tenía. Todos teníamos la mirada puesta en ellos, hasta que un corazón gigantesco apareció de la nada sobre nosotros. Este latía sutilmente, acelerando el ritmo de a pocos a la par que su brillo violeta se intensificaba. Fue luego de 13 segundos que los primeros gritos empezaban a escucharse.

-¿¡Qué esta pasando!?

-¡M-mi marca brilla!

-¿Estaremos bien?

Lentamente me alejaba del corazón, hasta llegar a un lado dentro del santuario. No podía avanzar más, estábamos encerrados. Al voltear, veía atónita el corazón flotante. De repente, un tenue haz de luz iba del suelo hacia el hacia eso, y la siguió otra y otra. Entendí el porqué de los gritos, y es que aquellas luces no era sino el alma de algunos esclavos cuyo cuerpo yacía en el suelo completamente deshidratados.

El caos reinó, y nos sumimos en la desesperación mientras el corazón seguía alimentándose de nuestras almas.

En medio de tanto alboroto, algunos portones parecían ceder ante los golpes; pero cuándo más cerca parecía la salida, del cielo descendieron 6 corazones más cada uno con diferentes marcas. Las personas desaparecían más rápido, llenando el lugar de cuerpos sin alma y sin vida.

Los que quedaban, que cada vez eran menos, golpeaban con más fuerza los portones. Algunas de ellos retrocedían con las extremidades rotas, otros iban peleándose con quien se acercara descargando su impotencia y el resto prefería golpear su cabeza contra las paredes para no sentir el dolor de ser despojado de tu alma.

Retrocedí hasta quedar de espaldas contra el muro. En medio de todo podía escuchar mi nombre, alguien lo gritaba. Busqué a mi alrededor de donde venía esa voz, hasta que sobre una de las paredes, estaba Anong junto a otros dos que, como ella, también querían escapar. Ellos me hacían señas para que corriera hacia ellos, quizás había encontrado la salida. Empecé a correr.

Logré abrirme paso entre todos. Casi al llegar pude notar una cuerda para que yo me trepara. Estiré la mano para alcanzarla, pero uno de los esclavos se dio cuenta también y me empujó, tomando él la cuerda. En la desesperación, tiró con tanta fuerza que Anong y el resto cayeron sobre él.

-¡Idiota!- el esclavo y uno de los acompañantes de Anong empezaron a pelear- ¡Ahora nos condenaste a nosotros!

Ayudé a Anong a levantarse, ella me abrazó y me dijo que había otra manera de poder escapar.

-Toma esto, tú eres la más importante aquí- Anong me colocó un collar extraño de color morado- Este collar protege de alguna manera a nosotros de la influencia de los corazones. Sé que aquella salida cederá pronto, pero al otro lado están listos para acabar con ellos. Así que... Déjame pensar un poco.

-Anong, no podremos hacerlo- sollozaba, me sentía débil y sentía una presión fuertemente sobre mí- No podré...

-Tú lo harás, con esto.- Anong sacó de su manga una carta. Era del mismo juego el cual yo y mi hermano solíamos enfrentarnos.- Si sobreviviste al primer estallido, y a este ritual, tienes la energía suficiente como para invocarlo y poder escapar.

-N-no entiendo, esto es solo un pedazo de papel. ¡Esto no es real!

-Sobre nosotros están cosas que te absorben el alma... ¿y crees que esto que te entrego no es real? No tengo tiempo para esto, Quilla.

A Sky Full Of Stars (From: STARS- A Yu-Gi-Oh! Saga)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora