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"Mi gran problema no es tu presencia en mis sueños, sino tu ausencia en mi realidad"

•----J.Jungkook----•

°Una semana después°

Me levanto exaltado, de nuevo ese sueño.

Toco mi frente y está cubierta en sudor.

--- Me estoy volviendo loco --- susurro.

Otra vez soñé con la humana.

Frustrado voy directo a darme una ducha.

Desde cuándo sueño con humanos?

Tallo mi cuerpo con la esponja y cierro mis ojos para relajarme.

Grave error.

La vuelvo a ver.

Paso la mano por mi cabellera negra y algo larga, necesito un corte de pelo, tal vez vaya a la ciudad, hace años que no voy.

Sigo pensando en el sueño que viene persiguiendome hace una semana.

Siempre es lo mismo, ella corriendo en el bosque a mi lado, su risa retumba en mi cabeza, no me molesta, al contrario, me relaja.

Su olor a vainilla vuelve a mi mente.

En el sueño aparecemos nosotros en el césped al rededor del fuego dandonos placer, ella se retuerce bajo mi cuerpo, me araña, me muerde, pronuncia mi nombre.

Lástima que no se el suyo.

Miro mis pantalones y tengo una gran erección cómo todas las mañanas desde hace ya una semana.

Hubiese deseado nunca haberla visto.

--- Genial, tengo que dar una clase en 15 minutos y no se que hacer con ésto --- miro mi duro falo.

"Piensa en la señora Huskyng"---dice mi mente.

Y como arte de magia mi pene volvió a la normalidad.

Gracias a la Luna por eso.
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--- Dylan, Mike, dejen de pelear de una puta vez --- Alzo mi voz hacia los lobos adolescentes.

---Alfa es que Mike no deja de decirme que soy un omega apestoso.

Dios mío estoy pensando seriamente en cambiar de trabajo.

--- Mike, deja de decirle a Dylan que es un omega apestoso, que seas un Alfa no te da el permiso a denigrarlo, si en un futuro quieres ser el Alfa de una manada debes saber que respetar a tus miembros es una de las cosas más importantes.--- digo un poco cabreado por su comportamiento inmaduro.

--- Si Alfa, pero él me mordió primero --- reprochó el lobo dorado.

--- No me importa quien mordió a quien, simplemente dejen de pelear, me están cansando con sus idioteces, hagan lo que les digo y no perturben mi paz de nuevo. --- Usé mi voz de Alfa.

Estos se quedaron callados y siguieron con el entrenamiento.

Al rato siento un pequeño cosquilleo en mis patas.

----Alfa, Dina se lastimó saltando una piedra, no se puede mover--- habló el pequeño lobo blanco.

Acaso no podía tener un minuto de paz?

Corrí en dirección de la loba, la pobre chillaba del dolor, su pierna estaba cubierta en sangre.

---Dina, te puedes levantar?--- pregunté amable.

∆𝕰𝖓 𝖊𝖑 𝖇𝖔𝖘𝖖𝖚𝖊∆ J.JKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora