Terreno desconocido

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Mi respiración seguía agitada y mis extremidades aún temblaban. El tiempo se hacia mas lento y me desesperaba en cada exhalación. Alcance a percibir un diminuto punto de luz que se colaba por la pequeña ventana del avión. Me pregunto si seré la única con estos síntomas. Una de las aeromozas se percató de mi incomodidad y me ofreció una pastilla.

- Para los mareos. Es usual en vuelos tan largos - La chica me sonrió y me paso también un vaso con agua.

- Gracias. Eres muy amable. -

- No tienes nada que agradecer. Es parte de mi trabajo. -

La chica se alejó para atender a otro de los pasajeros que ya tenia mas de dos horas ebrio. Pedía whisky a cada hora. La emoción del momento o tal vez es solo alguien que gusta de embriagarse en las alturas.

En el avión somos un grupo de veinte personas y todas tienen manías extrañas. Auriculares con sonidos de animales, otros usan cremas para todo, otros roncan con la boca abierta y se volvieron un mar de baba. Ya de por sí, decir que vamos a Chernóbil es demasiado.

Fui algo incrédula cuando le di click a esa publicación. Soy muy escéptica con lo que scrolleo en las redes sociales pero estaba algo corta de inspiración aquel día. Ese banner me resultó un tanto peculiar. Decía algo como "Expedición a la ciudad detenida en el tiempo".

Llene unos campos con mis datos y después un recuadro del porque me gustaría visitar Chernóbil. Pasaron 24hrs cuando en la bandeja de mi correo apareció una cita para un curso de capacitación antes de comenzar el viaje.

Cuando llegue al lugar de la cita la mayoría me vieron como si fuera un bicho raro. Era la mas joven esto lo podía asegurar y cuando comenzaron las presentaciones todos tenían casi diez doctorados, veinte maestrías y como mil licenciaturas, sin contar todos los cursos y diplomados que desbordaban sus Curriculum.

Note sus miradas burlonas cuando dije mi nombre y al menos tres se carcajearon cuando dije que solo soy diseñadora, bueno no los culpo. Soy una simple artista con ganas de ver algo nuevo y diferente, algo que pueda encender la chispa de la inspiración. Ellos son científicos con años de experiencia en investigaciones y experimentación en muchas cosas que realmente no recuerdo el nombre. Se que tiene que ver con algo de biología, genética y cosas de radiación.

Una de las científicas, Rebecca, se levantó molesta con el instructor y reclamo que porque yo fui elegida. Cuando tenía una compañera con años de experiencia en temas de elementos radiactivos que también participó en la convocatoria. La verdad, no sabia como reaccionar. El instructor se aclaró la voz y espero a que la científica Rebecca terminara de hablar.

- Espero que hayan leído las letras pequeñas de la convocatoria. El propósito de este viaje es hacer la mejor investigación sobre el accidente nuclear de 1986. No podremos acercarnos a la planta nuclear Vladimir Ilich Lenin. Pero tenemos en claro que ciertas zonas son habitables. Será un texto publicado con todos nuestros nombres en colaboración pero siempre es importante un punto de vista distinto al de ustedes. La empresa quiere que ella sea quien edite y elabore todos los diseños editoriales e ilustraciones que pueda conllevar. -

- Pero la edición puede ser al final del viaje, ¿Por qué tiene que ir? -

- Un diseñador no puede trabajar sobre algo que no conoce. El curso de inducción aún no termina. Le pido Doctora Rebecca que vuelva a su asiento y nos permita continuar. -

Me queria reir. Pero después de eso las miradas furiosas se volvieron hacia mí.

Cuando volví a casa fue solo para empacar mis cosas. El vuelo salía en las próximas 10 horas.

Nos dieron varios cuadernos de hojas blancas, plumas, lápices, borradores, colores, etc. Todo para hacer nuestras anotaciones de la manera más cómoda posible. Desde el abordaje los otros fueron muy claros que no querían tener nada que ver conmigo. Nadie me dirigía la palabra y me evitaban. Vaya discriminación por no pertenecer al mundo científico.

Llegamos a Ucrania y nos recogió un bus que nos dejo en la frontera de Chernobil. Después caminamos por mas de una hora. El guía nos señalo un edificio gris.

- Aquí es donde se quedarán durante los siguientes seis meses. No es lujosa pero tiene todas las amenidades necesarias. Agua caliente, gas, electricidad e internet. La lavanderia se recoge cada semana. Teniamos un chef que prepararia sus alimentos pero enfermó antes de llegar. Asi que cada quien sera responsable de su comida. Nos encargaremos de tenerles las alacenas llenas. Jazmín sera su ama de llaves cualquier duda ella se encargará de apoyarlos. Como sugerencia, yo no sacaría las laptop de aquí. -


La máquina de ChernóbilWhere stories live. Discover now