oh, sweet boy of mine // finkeldorf

Zehntel

Querido Freddy,

Debo confesar algo.

Ahora no puedo arrodillarme ante ti y pedirte perdón por mis pecados, pero tú, como si fueras un pastor, tendrás que entender mis palabras y aceptar mis confesiones de culpabilidad.

Mi querido niño, siento algo por ti.

Siento por ti algo que va más allá de la admiración, la simpatía, el compañerismo o la amistad.

Mi alma siente por ti de tal manera que, cuando no estás allí, exige tu regreso.

Cuando estamos separados sufre de agonía, y sabe que sólo con verte, se saciará su hambre.

He intentado entrar en razón muchas veces antes, sabiendo que tales sentimientos hacia alguien como tú de alguien como yo son antinaturales y erróneos; sin embargo, no puedo guardarme esto para mí mismo por más tiempo.

Mis manos nunca han escrito palabras más difíciles que éstas.

Si tus sentimientos son similares, te ruego que quemes esta carta y mañana por la mañana, cuando vengas a mi oficina, dime que mi madre me ha enviado un regalo de cumpleaños.

De lo contrario, puedes entregar esta carta a la Gestapo y, si llego vivo a mañana, dime que mi padre ha muerto. Nadie sospechará nada si quiero estar sólo el resto del día, mientras espero que mi destino se cumpla.

De cualquier manera, prometo que no huiré. Ya sea muerto, en un campo de concentración o con tu amor, me ocuparé de lo que me depare el futuro.

Sólo, estoy muy cansado...

Creo que nunca he anticipado más las luces de la mañana en toda mi vida.

K.