oh, sweet boy of mine // finkeldorf

Zwölfte

Mi querido niño,

He perdido la noción del tiempo desde que estamos juntos de esta manera. ¿Han pasado días? ¿Semanas? ¿Meses?

La guerra es dura con nosotros, lo sé, y espero que nuestro amor cure tus dolores tanto como los míos.

Cuando estoy contigo, nada más importa. Ni los bombardeos, ni la hambruna, ni siquiera el propio Führer.

Cada vez que estamos cerca siento que nada nos separa. Ni el aire, ni la ropa. En esos momentos sé que somos uno. Nuestra carne se une y siento tu mano alrededor de mi corazón; como si estuviese ahí.

Y a veces me duele porque sé, mi amor, que si quisieras podrías simplemente marcharte con eso, dejándome con un agujero sangrante en el pecho. Dios sabe que te dejaría ir. Y yo me quedaría ahí y dejaría que me arruinaras; tomando cada pedazo de mí hasta que no quede nada.

Sé que a veces, cuando todo se vuelve más difícil, temes que nunca serás suficiente para mí; temes que te deje en cualquier momento. Veo los celos que te persiguen cada vez que un chico entra a mi oficina, ya sea para comunicar una orden o para recoger algunos papeles. Debo decirte, que dejarte ir es imposible para mí.

Freddy, te juro por mi vida que te amo y sé, desde el fondo de mi corazón, que sólo te amaré a ti.

Soy total e incondicionalmente tuyo, y haré lo que desees.

Me siento un esclavo de ti, cada deseo tuyo es un mandamiento.

Nunca dudaré si se trata de ti.

Tuyo,

K.