Al despertar al día siguiente mi cabeza me dolía mas de lo que nunca había sentido.
Me dirijo a la cocina a beber algo de agua. Cuando mire el sillón Fran estaba ahí, por un lado me sentí en paz, por el otro preocupada podría venir Gonza y de él no sabía nada, eso me asustaba.
Comencé a preparar el desayuno, Fran aun dormía, "Que buen amigo pensé".
- Buen día.
- ¡Buen día Fran!
- Siento haberme quedado, anoche estaba muy preocupado y sentí que no podía dejarte en esas condiciones.
- Si, de eso quería hablar. No quiero que creas que Gonzalo es así siempre, es solo que está cansado.
- Entiendo Camí, yo soy tu amigo y no quiero nada con vos. Pero mira, si estaban solos pensaste ¿que podría haber pasado?
- No Fran, no es lo que te imaginas, nada que ver, Gonza no es así.
- Mira Camí, sos re piba todavía, no me gustaría ver tu nombre en la televisión por que algún loco tomo decisiones por vos.
- No exageres Fran. Te quiero pero no es así.
- Bueno, solamente quiero cuidarte.
Ese día fuimos a clase juntos, aunque estábamos medios tensos por la charla del desayuno entre clase y clase todo continuo como si nada. Pero algo en mi mente seguía repitiéndose, ¿estas feliz con esto? ¿y si se repite nuevamente?
Durante las horas de clase Gonzalo me llamaba, al salir respondí las llamadas se lo notaba muy apenado, decidí decirle que nos veamos un rato en mi departamento. Al llegar el me estaba esperando, me asuste, pero cuando me miro vi sus ojitos llenos de lágrimas, lo abracé y llorando me suplico que lo perdone.
- Perdóname Camila, pero no tolero verte con otro.
- Gonzalo. ¿Qué decís?
- No tolero verte o saber que estas con otro hombre.
- Gonza, ¿vos te escuchas? Me preocupa, realmente me preocupa que digas eso.
- Bueno.
- No Gonzalo, no podés ser así, nunca hice ni haría nada en contra tuyo.
- Que estés con otro no significa que estés en mi contra.
- Haber Gonzalo. Te amo y no me interesa estar con nadie mas que no seas vos.
- Perdón amor, prometo que eso no va a volver a pasar.
Decidí darle una segunda oportunidad, pero no era lo mismo. Luego de esa noche, comenzó aquello que yo llame el inicio del fin.
El tiempo pasó, el me hizo muchas cosas que me lastimaron, pero la gota que derramo el vaso fue el hecho de que me haya pegado por solo usar un vestido escotado para la noche de chicas. Paso un mes de ese brote de locura de Gonzalo ya soporté bastante y las cosas no iban muy bien que digamos.
Intente perdonarlo y luchar por el tiempo que llevamos juntos, la facultad me demandaba mucho tiempo, cada vez que nos veíamos eran muchas peleas, no podía ver a mis amigos, realmente estaba sufriendo. Fue así que decidí terminar con el .
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La vida
FantasyEsta es la historia de la vida de Camila una chica de 25 años con muchos sueños por cumplir pero con una dura vida que la llevo hasta el presente.