Capítulo 12: El regalo de los hermanos Okogi (parte 2)

548 47 13
                                    

-Mei espera- dije separándole- estás segura de esto?- pregunté

-Estoy mas que segura Yuzu, por favor, te necesito, necesito de ti- me dijo

-Mei... yo...- fui callada por sus labios, ella me besaba con ternuraa y mucho amor, el beso pasó de ser tierno y dulce a feroz y con mucha pasión y deseo.

Llegó un momento en el que ya no pude contenerme mas, cogí a Mei y la puse abajo y yo arriba, la empecé a besar con deseo mientras iba quitándole todas y cada una de sus piezas de ropa, mientras la besaba por aquí y por allí, y ella intentaba quitarme mi ropa. Acabamos desnudas las dos.

-Eres hermosa..- me dijo Mei sonrojada al ver mi cuerpo desnudo- tu cuerpo, toda tú.. eres perfecta..- me dijo

-Tu también eres hermosa y perfecta Mei- le dije sonriéndole- estás segura de esto?- pregunté

-Por favor, Yuzu, no puedo esperar más, te amo, y quiero sentir todo de ti- me dijo roja como un tómate

-Mei..- sin decir nada mas la besé, fui bajando dejando besos húmedos por cada milímetro de su piel hasta llegar a sus pechos, besaba, chupaba y mordisqueaba sus pezones, cuando acabé de darle atención a ambos pechos, fui bajando de su pecho, por las costillas, besando todas y cada una de sus costillas, bajaba por su abdomen, hasta llegar a su cintura- segura que quieres que siga?- pregunté

-Por favor.. hazme tuya de una vez- me dijo

Sin mas empecé a lamer por aquí y por allá.. (y bueno ya saben lo que pasó seguidamente, lo dejo a la imaginación de cada un@)

Pov Mei

Desperté con el sonido de la ducha, miré y estaba desnuda, mi cuerpo habían marcas notables de lo ocurrido anoche, por fin, por fin pude ser una con mi amada Yuzuko, la amo tanto, fue como un sueño, si no fueran por las marchas en mi cuerpo, de chupetones y mordiscos pensaría que solo fue un sueño, pero soy feliz, soy feliz de que por fin he podido ser una con Yuzu.
Me levanté y me colé en la ducha, me quedé mirando el cuerpo de mi rubia, también tenía marcas por todo su cuerpo, tiene un cuerpo de infarto, y es toda mía, nadie mas puede tocarla.

-Mei, que haces ahí parada, ven a ducharte- me dijo mi rubia sacándome de mi trance, yo asentí y me metí bajo la ducha.

No podía apartar mi mirada de su cuerpo, ¿me habré hecho adicta?
No pude mas y me lancé sobre Yuzu

-Aaah- Yuzu gimió por que estaba absorbiendo su pezón, y así empezó nuestra 4 ronda, al finalizar decidimos ducharnos y vestirnos.
Una vez abajo éramos las primeras.

-Mamii!!- dijo el pequeño niño que ha robado mi corazón desde el primer momento en que lo vi, se parece tanto a Yuzu, pero se parece mas a Seisuke y al padre de Yuzu

-Buenos días mi pequeño hombrecito- le dijo Yuzu agachándose y envolviéndolo en sus brazos y besando su cabeza, el niño se acurrucó en el cuerpo de su madre, es una imagen muy bonita, no pienso dejar que nadie me quite estos momentos, ni siquiera mi abuelo.
Poco a poco iban bajando todos, estábamos desayunando.

-Bueno, papá, mamá, tenéis que preparar vuestra maleta por 5 días, y Sasuke tu irás con tus abuelos de vacaciones, mamá y tus tíos tenemos trabajo que hacer y para que no te quedes solo, prefiero que vayas con tus abuelos estos 5 días- dijo mi rubia

-Donde iremos hija?- preguntó nuestra madre

-Mei, Seisuke y yo os hemos pagado 5 dias en el SPA\Hotel San Francisco- dijo Yuzu

Volver A JugarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora